Colapso de tubo genera laguna de aguas negras

El colector de aguas negras, de 72 pulgadas, ubicado al Poniente de Hermosillo y que recibe el 50% de aguas residuales generadas en la ciudad y agua de lluvia acumulada, colapsó por las lluvias de “Newton”, informó Agua de Hermosillo.

“Se repara la tubería con horarios extendidos para agilizar la terminación de los trabajos”, añade Agua de Hermosillo a través de una tarjeta informativa.

“Ante la profundidad de excavaciones de casi 10 metros”, precisa, “podrían registrarse derrumbes por los materiales inestables y los grandes volúmenes de agua acumulada”.

“Para minimizar el impacto ambiental y los efectos de aromas por el derrame, se aplican productos a base de microalgas y bacterias, que permitirán inhibir el problema de malos olores”, afirmó la paramunicipal.

Hermosillo

Hermosillo registra temperatura máxima de 40°C por primera vez en 2024

Y es que vecinos del lugar comentan que hace alrededor de un mes empezaron a ver mayor cantidad de aguas residuales que llegan a esa zona.

Adrián de los Reyes, residente en Villa Bonita, contó que en los 10 años que tiene como vecino en la zona afectada, nunca había imaginado las consecuencias que habitar cerca de aguas negras podría acarrear.

“Yo me imagino que todo eso va a traer a largo plazo algún tipo de enfermedad. Siempre se ha sentido el aroma, pero ahora lo que veo es que está más concentrado, antes uno pasaba y había un charquito, pero se está llenando”, destacó.

De los Reyes comentó que en el último mes ha visto mayor cantidad de lagunas de aguas negras, así como más líquido en ellas, y que incluso se percató de que los canales hechos de concreto se encuentran colapsados.

Un área aproximada a los 4.8 kilómetros cuadrados, si se toman en cuenta las zonas donde los habitantes aseguraron que llegan los malos olores, es la parte afectada por la acumulación de aguas residuales al Poniente de Hermosillo.

Residentes de Villa Bonita, Montecarlo y Los Lagos, manifestaron que el estancamiento de aguas residuales, ubicado a la altura de los bulevares Paseo Río Sonora y Antonio Quiroga, producen no sólo contaminación, sino pestes insoportables.

Rosarito

Aguas negras del arroyo Huahuatay inundan playa en Rosarito

Los habitantes de los tres sectores mencionados afirmaron realizar sus actividades diarias sin problema alguno durante el día, pero es al llegar la noche cuando empieza el sufrimiento, pues no pueden siquiera abrir una ventana en sus hogares.

“Además de los problemas de salud que debe estar provocando, es extremadamente fuerte la peste, porque no se le puede llamar olor, lo que desde hace tiempo hemos estado sufriendo”, acentuó Héctor Uriarte.

Desde hace 15 años Uriarte vive en Montecarlo, y según comentó, en los últimos cinco años los malos olores han incrementado de fuertes a extremos, principalmente durante las noches.

“A partir de las ocho de la noche han de hacer algún movimiento con las aguas, porque es impresionante la peste”, declaró, “es un problema muy serio que nos afecta mucho, particularmente a los niños”.

Adrián de los Reyes considera que el Municipio debería de tomar medidas al respecto.

“Me pregunto por qué o qué estarán haciendo”, subrayó, “si el Municipio no tiene dinero para echar andar la planta tratadora, de perdida que meta un tractor y haga un canal que desvíe el agua lejos de esta área”.

Aunque varios habitantes de los diferentes sectores coincidieron en que la principal preocupación es la salud, no descartan que la contaminación ambiental causada por las lagunas también sea un rubro importante que las autoridades deberían atender de manera urgente.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) en el Estado, reiteró que la problemática tiene que ser tratada por el Municipio, pues se debe al desfogue de aguas residuales, así como una parte del drenaje pluvial de Hermosillo.

“Ahí (en Paseo Río Sonora y Antonio Quiroga) se extrajo hace años material pétreo y quedaron esos hoyos. Un canal a cielo abierto lleva las aguas negras hacia allá, y eso lo opera el organismo de agua potable”, aclaró la dependencia.