Descubre el Monte Roraima, la montaña que desafía la geología y guarda misterios antiguos

Ubicado en el sureste de Venezuela, el Monte Roraima, también conocido como el tepuy Roraima, ha fascinado a científicos durante más de 500 años debido a su intrigante formación geológica. Con una altura de casi 3,000 metros sobre el nivel del mar, esta montaña presenta características únicas que desafían las explicaciones convencionales sobre la evolución geológica.

El Monte Roraima forma parte del Parque Nacional Canaima y es la formación rocosa más grande de su tipo en América del Sur. Situado en la cadena montañosa del Pakaraima, su estructura plana en la cima lo distingue de cualquier otra montaña en el mundo. Con una superficie de más de 30 kilómetros cuadrados de cima horizontal, rodeada por impresionantes cascadas y acantilados, el Monte Roraima parece una isla elevada en un mar de nubes, lo que ha alimentado teorías sobre su origen y propósito en la naturaleza.

Lo que más desconcierta a los científicos es la precisión de sus ángulos y las formas aparentemente artificiales que muestra la montaña, como si hubiera sido cortada con cuchillos. Aunque algunos geólogos sugieren que podría ser el resultado de un antiguo terremoto, ninguna otra formación geológica similar tiene una forma tan exacta y distintiva. Esta característica ha llevado a muchos a teorizar que el Monte Roraima podría ser la formación rocosa más antigua de la Tierra.

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Además de su asombrosa forma, el Monte Roraima alberga una gran cantidad de especies vegetales y animales endémicas. Se cree que en sus rincones más remotos podrían esconderse especies que la ciencia aún no ha descubierto, ya que muchas áreas de la montaña siguen sin explorarse. La biodiversidad de la zona es otro de los factores que atrae la atención de biólogos y geólogos de todo el mundo.

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Sin embargo, la investigación de campo en el Monte Roraima no es tarea fácil. No existe un acceso directo a la montaña, y los investigadores deben escalar otras montañas de la cadena Pakaraima o utilizar helicópteros. Las rutas alternas han resultado ser peligrosas, con varios intentos fallidos que han terminado en tragedias. Por ello, acceder a la zona requiere permisos especiales de las autoridades locales, lo que hace que el Monte Roraima siga siendo un enigma difícil de desentrañar.

Con información de Natgeo.