Spider-man: a través del spider-verso

Hace cinco años, Spider-Man: Un nuevo universo, irrumpió en el, desde entonces ya cansado, mundo del cine superheroico, con una propuesta innovadora y refrescante. Capturando toda la magia de la fuente original (historietas) que las adaptaciones en vivo rara vez han podido recrear, con animación vanguardista muy por encima de lo que se venía creando y con una temática que generaba empatía y apelaba a las emociones, Un nuevo universo, ganó el Oscar a la mejor película animada en 2019.

La secuela, con un relevo de directores, pero con el retorno de los escritores/productores Phillip Lord y Chris Miller, hace que la animación de la original se vea primitiva en comparación. Un absoluto deleite visual, de principio a fin.

La historia se desarrolla un año después de la primera parte, Miles Morales (voz de Shameik Moore), después de su aventura con varios de los arañas del multiverso, se ha acostumbrado a ser el amigable Hombre Araña de su propio universo. Sin embargo, un hilo suelto, porque siempre los hay, crea un nuevo problema multiversal. Y en esta ocasión se requerirá de la intervención de todos los arañas posibles, e imposibles, existentes.

En un ambiente en que las historias del multiverso ya han sido tan manoseadas y explotadas, Lord y Miller, logran presentar un historia interesante, que va más allá de toda la exuberante pirotecnia visual, para hablar de la conexión y desconexión entre padres e hijos, del paso de la adolescencia a la madurez y del poder de los arquetipos y los cánones narrativos.

Esto último es a lo que se le da mayor importancia, ya que dentro del arco narrativo de Miles Morales siempre ha existido un problema, se sale de lo canónico. Su desarrollo no se adscribe a lo que conforma la esencia de todos los arañas, un hecho dramático que los empuja a convertirse en héroes, casi siempre la muerte de alguien cercano. Ni siquiera la araña radioactiva que lo mordió correspondía a su universo.

Esto genera el segundo conflicto de la historia, Miles es una anomalía, y a través de sus actos está creando disrupción en el multiverso. Por lo tanto, debe ser detenido por la autoridad máxima del Arañaverso, representada por Miguel O’Hara (voz de Oscar Isaac).

Paralelamente se desarrolla la historia de Gwen Stacy (voz de Hailee Steinfeld) y la difícil relación con su padre policía, quien desconoce su identidad secreta como la Mujer Araña, y cree que es una asesina. Este drama familiar genera uno de los mejores momentos de la cinta, visual y emocionalmente. Escena que, además, ha generado controversia por tratarse de una alegoría lgbtq, debido a la presencia de la bandera trans y el uso de sus col