Japón registra cifra récord de refugiados en 2023

TOKIO.- Según lo anunciado por la Agencia de Servicios Migratorios de Japón, el país asiático otorgó el estatus de refugiado a 303 personas en el año 2023, marcando un incremento significativo de 101 individuos en comparación con el año anterior. Este número representa la cifra más alta registrada desde que se comenzaron a recopilar estos datos en 1982.

El aumento en el número de refugiados reconocidos se atribuye, en gran medida, a la flexibilización de las medidas restrictivas de control fronterizo implementadas debido a la pandemia del coronavirus.

Este incremento se da en el contexto de un notable aumento en las solicitudes de asilo, con un total de 13,823 solicitudes recibidas en el último año, lo que representa un aumento de 10,051 solicitudes en comparación con el año 2022. Este número es el segundo más alto registrado, después del pico de solicitudes en 2017, cuando se presentaron 19,629 peticiones.

Reformas controvertidas en la ley de inmigración

El gobierno japonés aprobó en 2023 una controvertida reforma de la ley de inmigración. Esta reforma incluyó disposiciones criticadas por organizaciones como Amnistía Internacional, entre las que se encuentra la posibilidad de expulsar del país a quienes hayan solicitado el estatus de refugiado en más de tres ocasiones.

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Además de estas medidas, se implementó un programa de “protección complementaria” que fue solicitado por 1,110 personas y otorgado a 647 individuos, principalmente de Ucrania y Sudán, quienes podrán permanecer en Japón en condiciones similares a las de los refugiados.

Perfil de los refugiados y desafíos

El mayor grupo de personas reconocidas como refugiadas en 2023 son ciudadanos afganos, con un total de 237 individuos. Muchos de ellos eran empleados de la Agencia de Cooperación Internacional de Japón y huyeron de su país tras la toma de control por parte de los talibanes.

El resto de los refugiados provienen de diversas partes del mundo, como Birmania, Etiopía, Yemen, China, entre otros. Sin embargo, a pesar del aumento en el número de refugiados reconocidos, el número de peticiones de revisión de solicitudes rechazadas también aumentó, lo que refleja desafíos persistentes en el proceso de asilo en Japón.

Críticas y expectativas futuras

La baja tasa de reconocimiento de refugiados en Japón ha sido objeto de críticas por parte de grupos de apoyo a estas personas y organizaciones internacionales. Esto se debe, en parte, a la ambigua definición de refugiado en el país.

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A pesar de estos desafíos, Japón ofrece a las personas reconocidas con el estatus de refugiado un permiso de residencia de hasta cinco años, con la posibilidad de solicitar la residencia permanente posteriormente si cumplen con ciertos requisitos. Esto plantea expectativas sobre cómo evolucionará el panorama de refugiados en el país en los próximos años.