Artesano conserva la esencia de las calendas oaxaqueñas a través de la cartonería

OAXACA, México.-Tonatiuh Estrada, un artesano mexicano de 46 años, va más allá de crear imponentes figuras de cartón que alcanzan más de tres metros de altura.

Su verdadera pasión reside en plasmar documentos y conocimientos en sus creaciones.

"Quiero que cuando la gente observe cómo las personas utilizan un huipil (vestido tradicional) o un peinado, también comprendan su significado", dice Tonatiuh, quien busca transmitir no solo un adorno visual, sino también sabiduría a través de sus obras.

Obras representativas

Espectaculos

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Recientemente, el gobierno local solicitó sus servicios para celebrar un evento especial, para el cual modeló ocho piezas representativas de las distintas regiones estatales.

Entre las creaciones destacaron siete mujeres y un hombre vestido como diablo. Según explica el artesano, la intención era honrar y valorar la diversidad étnica y los colores de la región.

Tonatiuh se especializa en la cartonería, una antigua técnica de modelado en papel, y en la creación de muñecas de calendas, que son utilizadas en las procesiones tradicionales oaxaqueñas durante las fiestas patronales y festividades religiosas.

En riesgo de perder su verdadero significado

Aunque estas calendas se han vuelto populares en Oaxaca y son comunes en las celebraciones de recién casados, algunos expresan preocupación por el riesgo de perder su auténtico significado.

Nayelli López, residente de la capital, señala que lo que se ve en las bodas son recorridos y no auténticas calendas, que originalmente eran símbolos de fe llevados a las iglesias.

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Tonatiuh se esfuerza por preservar y difundir el contexto espiritual y la historia detrás de cada figura que crea.

Las calendas

Realiza una minuciosa investigación para cada pedido y comprende que estas figuras de calenda han sido utilizadas desde la época de la Conquista para evangelizar, por lo que cada adorno contiene información histórica.

El proceso de creación de sus piezas es laborioso y requiere de tiempo y paciencia. Primero, fabrica un armazón de madera y lo cubre con barro, moldeándolo como una escultura.

Posteriormente, envuelve la figura con plástico y comienza a pegar capas de papel, creando una estructura sólida. Después de lijar y perfeccionar la textura, pinta cuidadosamente cada detalle.

El desafío de confeccionar las calendas

A pesar de los desafíos en la confección de sus últimas figuras debido a los tiempos ajustados, Tonatiuh se siente satisfecho con el resultado.

La gente ha reaccionado positivamente. Se toman fotos, se sienten identificados y les alegra que las muñecas representen la diversidad morena", comparte emocionado.

La Guelaguetza, un evento icónico de Oaxaca, ha sido objeto de análisis cautelosos por parte de algunos investigadores, ya que no todos los pueblos originarios participan y su origen fue impulsado por el nacionalismo.

La Guelaguetza

La antropóloga Gabriela Zapién explica que fue inicialmente presentado como un homenaje racial y que se trata de una tradición construida.

Tonatiuh está de acuerdo en que la Guelaguetza puede tener sus cuestionamientos, pero considera que a lo largo del tiempo ha logrado algo positivo al exhibir y revalorizar las costumbres y tradiciones locales.

La palabra "Guelaguetza" tiene un significado profundo para los oaxaqueños, asociado tanto con un festejo como con la ayuda mutua. Tonatiuh concluye con una sonrisa: "Lo bonito de Oaxaca es que su cultura no es estática ni de museo, sino una cultura viva".