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El Imparcial / Sonora / Retos y Oportunidades

Ergonomía laboral y tu silla

Para el llamado trabajo de oficina, que generalmente se realiza sentado, la silla es un elemento fundamental ya que juega un elemento importante para la salud.

Al hacer tus labores diarias en la oficina, ¿te has detenido a pensar cuántas horas pasas sentado y en qué lo haces? Las sillas de trabajo se han vuelto indispensables y la recomendación es que sean ergonómicas, es decir, prevenir con su uso cotidiano futuros problemas de salud, malas posturas y estrés.
El primer riesgo que se puede identificar y que tiene relación con la silla es la mala postura que se adopta, destacó Francisco Octavio López Millán, profesor del Departamento de Ingeniería Industrial del Instituto Tecnológico de Hermosillo y experto en ergonomía laboral.
“La tarea de la silla es propiciar, a través de un buen diseño, que tú tengas buena postura”, recalcó; “lo mejor, lo más adecuado para hacer un trabajo es que la postura de tu espalda sea recta”.

Buen soporte

De inicio, afirmó, la silla debe tener un buen soporte lumbar ajustable de tal forma que la el usuario pueda alinear la espalda baja, o bien, la espalda alta para mantenerla recta, así como la altura para tener una correcta posición de brazos y hombros.
“También tiene que ver que los descansabrazos sean abatibles porque si no tengo dónde soportar los hombros, éstos quedan en el aire y si esto pasa, es una postura sostenida; eso es otro factor de riesgo”, detalló.
Una silla que permita un buen porte ostenta importancia, dijo, debido a que ya el sólo hecho de estar sentado es una mala postura y estos problemas que se consideran sencillos resultan ser acumulativos y redundan, con el tiempo, en minusvalías a la salud.

Riesgos

López Millán refirió que los efectos de las malas posturas se ven a largo plazo, por ejemplo, en la espalda puede presentarse lumbalgia, padecimiento típico de una mala postura.
También es posible contar con una buena silla, expuso, pero que el usuario se siente de manera inadecuada, lo que ocurre cuando usa el teléfono celular al estar sentado e inclinar la cabeza, propiciando que la espalda se curve.
El experto recomendó no estar sentado más de dos horas seguidas y cuando transcurra este tiempo levantarse, dar algunos pasos, estirar el cuerpo y luego regresar a las labores.

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