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Un año de retos para el sector de la construcción

Motivado por la desaceleración en la actividad económica nacional, por los cambios en la visión de políticas públicas, transición del nuevo Gobierno y la renegociación del T-MEC...

Para la industria de la construcción el 2019 fue un año complejo, motivado por la desaceleración en la actividad económica nacional, por los cambios en la visión de políticas públicas, transición del nuevo Gobierno y la renegociación del T-MEC, fueron las principales causas de una reducción entre la inversión pública y privada que se tradujo en una menor ejecución de proyectos.

Al hacer un balance del comportamiento de la industria, los indicadores del Centro de Estudios del Sector de la Construcción (Ceesco), reflejan que en el 2018 en Sonora la contracción fue de (-) 5% y el 2019 cierra en un (-) 10%, lo que significa que la industria dejó de generar en el Estado 1 mil 346 millones de pesos; y a nivel nacional cerró en (-7)%, siendo 23 mil 65 millones de pesos lo que se dejó de facturar comparado con el 2018.

Con estos resultados, fue poca la derrama económica que se generó, afectando a toda la cadena de proveeduría, las fuentes de empleo y el desarrollo en infraestructura.

En el análisis de Ceesco, la iniciativa privada impidió que la contracción del sector fuera aún mayor, gracias a la construcción de vivienda, plazas comerciales y desarrollos verticales.

En Sonora, el 64.8% de la obra que se desarrolla es por el sector privado que representa 9 mil 917 millones de pesos, registrando un crecimiento de 21.7% comparado al 2018, mientras que la inversión pública fue del 35.2% con un valor de 5 mil 391 millones de pesos, registrando una caída de (-) 38.2% con relación a lo contratado hace un año.

Los constructores tenemos confianza del anuncio del Acuerdo Nacional de Infraestructura representa una buena oportunidad para el inversionista privado participe en proyectos de infraestructura entre los que destacan construcción de carreteras, puertos, aeropuertos, proyectos hidráulicos entre otros; en caso de Sonora será en el 2021 que se ejecuten las obras contempladas (Desaladora en Puerto Peñasco, obras en aeropuerto de Hermosillo, y construcción del bulevar en Sonoyta).

Esperemos que en este 2020, se aterricen otros proyectos prioritarios y necesarios, ya que Sonora cuenta con importantes recursos naturales tales como el litio, desarrollo de la industria aeroespacial, el turismo y actividad de energía renovables, entre otros.

En este contexto, la iniciativa pública y privada debe ir de la mano para que se detone la economía nacional y local que tanta falta nos hace, para ello es recomendable una buena planeación de los proyectos, que se ejecuten las obras en tiempo y forma y que las dependencias de Gobierno realicen mejores prácticas en el buen manejo de los recursos y que las empresas reciban el pago con oportunidad.

Se necesita incluir la participación de las mipymes, en todos los proyectos prioritarios con enfoque regional, lo que impactará de manera contundente en la economía de las comunidades.

Las expectativas para el 2020, refleja un crecimiento de entre (+) 0.5% a (+) 1.5%; existe entusiasmo por parte de los empresarios de la construcción de seguir asumiendo retos que nuestro sector demanda.

Por último, aprovecho este espacio para desearles un feliz Año Nuevo, que sea de mucho éxito y que sigan construyendo sus sueños.

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