Enfrentan 4 municipios crisis por falta de agua

Guaymas, Empalme, San Javier y Nacozari de García son los municipios que hoy presentan mayor desabasto del líquido vital, pero que se han realizado acciones para evitar que se sequen, declaró Jesús Salvador Sánchez Meléndrez.

El director general de Desarrollo y Fortalecimiento Institucional de la Comisión Estatal del Agua (CEA) detalló que la falta de agua en Guaymas y Empalme se atiende con la construcción de la planta desaladora, mientas que en San Javier se han abierto nuevos pozos; del caso de Nacozari especificó que se busca la construcción de una presa.

“Estos municipios presentan esta problemática por la falta de lluvia, vivimos en un Estado semidesértico, hay problemas pero estamos trabajando para solucionarlos”, refirió al recordar hoy el Día Mundial del Agua.

Como solución a la falta de agua en la entidad, el director de Desarrollo y Fortalecimiento Institucional subrayó el fomento de la cultura del cuidado del vital líquido y la desalinización.

Sonora

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Nicolás Pineda Pablos, investigador del Colegio de Sonora (Colson), consideró que un problema estructural en el desabasto de agua es la centralización de su gestión, es decir, que las cuencas y mantos acuíferos están bajo resguardo del Gobierno federal a través la Ley de Aguas Nacionales, cuando no hay suficiente personal para la vigilancia de las superficies acuáticas.

Dijo que los usuarios de las aguas, al ser tratados como concesionarios y no como dueños, se da un juego perverso en el que se trata de “trampear” a la autoridad tratando de sustraer la mayor cantidad del vital líquido para diversas actividades productivas.

“El Gobierno federal no tiene ni el personal ni los inspectores, aparentemente hace las leyes muy estrictas pero en la práctica no hay inspección de las extracciones de agua, entonces los usuarios se comportan como que les van a quitar el agua y tienen que extraer más de los que se les permite”, expuso el investigador en Gestión Integral del Agua.

La falta de planeación hídrica, indicó que ha dado paso a las concesiones o títulos de derecho de agua que otorga la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a cada uno de los rancheros, ganaderos, agricultores, e incluso a organismos urbanos para la extracción del líquido vital de un determinado cuerpo de agua.

Refirió que a través de estas concesiones, en Sonora se ha dado más agua de la que se tiene y ha ocasionado una situación de desabasto a algunos municipios como sucedió en el distrito de riego de Estación Pesqueira, donde se entregó el líquido que años después le hizo falta a Hermosillo.

Puntualizó que la contaminación de los ríos, a través de actividades productivas como la minería, resulta otro factor que incide de manera negativa en el abasto de agua en la entidad.

Sonora

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“Somos el Estado más minero de México, con menos agua y tenemos un serio problema de los jales y desechos de las minerías, de los materiales, del agua que requieren las mineras que con mucha frecuencia contaminan ríos en proporciones no tan escandalosas como la que sucedió en Cananea el 6 de agosto de 2014”, apuntó.

Para tener mayor control de las aguas, Pineda Pablos consideró que la Conagua debe otorgar mayor poder a la Comisión Estatal del Agua (CEA) para hacer la planeación que requiera la extracción de agua en la entidad.

A pesar de que hoy en día la mayoría de los municipios cuentan con agua, el investigador del Colson no descartó la posibilidad de que con el paso de los años el Estado pudiera quedarse sin líquido vital.

“Yo creo que no nos damos cuenta de que Sonora se puede quedar sin agua y quizás estemos a la mitad del camino, o no sé si más allá; nos acostumbramos a ver esto y nunca conocimos un Río Sonora caudaloso”, refirió.

El problema de los organismos municipales señaló que se encuentra principalmente en el manejo político que se le da al agua con nombramientos directivos que no tienen planeación del uso correcto del líquido vital.

Indicó que en los organismos municipales hay administraciones que cuidan muy bien este recurso natural pero que no se nota porque tres años después llegan otros gobiernos que desechan la estrategia.

El modelo al que debe avanzar la gestión del agua para preservarla en la entidad, Pineda Pablos puntualizó que debe ser integral que una la planeación urbana con la plantación agrícola y la planeación industrial.

“Así como aquí no debemos tener industria húmeda ni ingenios azucareros porque ocupan mucho agua del Estado, la agricultura también debe de modificarse porque se lleva entre el 70% y 80% del liquido vital”, puntualizó.

Para garantizar el agua en Sonora precisó que se deben establecer estrategias enfocadas a la sustentabilidad, es decir ríos que los ríos se recarguen y que funcionen para siempre y no solo por tres años.

Alrededor de 2 mil pesos le cuesta a Agua de Hermosillo reparar una fuga de agua de toma domiciliaria, de las cuales se presentan cerca de 70 reportes al día, informó el gerente de Distribución y Redes en Agua de Hermosillo.

Jesús Gilberto Carrillo Rojas indicó que el desperdicio de agua en la capital sonorense se registra debido a que gran parte de la red de distribución hoy en día está en pésimas condiciones.

Puntualizó que de mil 100 kilómetros de tuberías, más del 30% ya rebasaron su tiempo de vida útil que por lo regular es de 30 a 40 años.

“El aire es un enemigo para las tuberías, su presencia ayuda a las fugas, junto con el agua genera un fenómeno que busca la salida del aire y genera la fuga; hay dispositivos para aliviar ese problema pero a veces no resulta suficiente”, señaló el gerente de Distribución y Redes en Agua de Hermosillo.