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Ahora la carretera es Guaymas-Juárez

La nueva carretera Sonora-Chihuahua podrá ser verdaderamente competitiva sí sólo sí, se construye bajo los mismos (o mejores) estándares que la Sinaloa-Durango.

Javier  Villegas Orpinela

Efecto Multiplicador


El proyecto sexenal “Prosperidad Compartida” que recién presentó la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum, respalda los grandes planes de infraestructura para Sonora como el de la carretera que conecte a nuestra entidad con Chihuahua.

También, el de un tren de pasajeros y el de la modernización del Puerto de Guaymas.

Sin embargo, modifica el trazo original que marcaba que la rúa interestatal bajaría hasta la Comisaría de Esperanza (que hace vecindad con Ciudad Obregón) y que el tramo conectaría a la capital del Estado vecino con la ciudad porteña más añeja de Sonora.

Ahora, por lo que se alcanza a ver en el mapeo actualizado, la “nueva carretera” conectaría a Hermosillo para luego bajar a Guaymas teniendo un nuevo destino en el extremo Noreste que sería la pujante ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, sin pasar por Chihuahua capital.

De ser correcto el nuevo trazo, la carretera que proyecta Sheinbaum deberá ser una verdadera autopista como la que ahora existe entre Sinaloa y Durango, la cual conecta Mazatlán con la capital duranguense y atraviesa los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Esta magna obra de la ingeniería cuenta con decenas de túneles y puentes de primer mundo donde destaca el Baluarte.

Bueno, pues la nueva carretera Sonora-Chihuahua podrá ser verdaderamente competitiva sí sólo sí, se construye bajo los mismos (o mejores) estándares que la Sinaloa-Durango, ya que de no ser así el cacareado proyecto tendrá un mínimo impacto (si es que lo tiene) en el terreno económico-turístico, que es lo que se pretende según lo reiterado por el gobernador Alfonso Durazo.

¿SONORA ENLAZADO CON TEXAS?

Si se conecta a Guaymas con Ciudad Juárez mediante una autopista (no una simple carretera), entonces se estará asegurando para Sonora un efecto económico de altos vuelos.

Ello porque la economía de nuestro Estado (a través de Juárez) se estaría enlazando con Texas, que es la segunda economía más grande de Estados Unidos -la octava a nivel mundial- y cuyo PIB es de 2.5 billones de dólares; la número uno de EU es la del Estado de California con 3.8 billones para ser la sexta más grande del planeta.

Para medir la magnitud económica de Texas debe apuntarse que el PIB mexicano es de 1.8 billones de dólares; 700 mil millones de dólares menos que dicha entidad.

Respecto a California nuestro PIB nacional es inferior en 2 mil millones de dólares.

Cabe agregar que a los nuevos beneficios económicos del enlace con Texas, se sumaría la fortaleza económica que ahora enseñan las dos entidades mexicanas: Sonora y Chihuahua, donde sus PIB’s más actualizados rondan los 63 mil millones y 68 mil millones de dólares, respectivamente.

En esta nueva dinámica Sonora puede añadir con mayor fuerza al Estado de Arizona cuidando la conectividad carretera y ferroviaria.

Recordemos que la economía de Arizona no es cualquier cosa, puesto que su PIB es de 510 mil millones de dólares; por lo menos ocho veces superior a la sonorense.

La industria de los semiconductores que se instala en Phoenix, disparará aún más el poderío económico de Arizona y Sonora no debe quedarse con los brazos cruzados.

El valor de este estratégico sector que da forma y vida a dispositivos electrónicos como: Smartphones, tablets y computadoras personales, es de más de 600 mil millones de dólares (la tercera parte de la economía mexicana).

Esta industria, estrechamente ligada al silicio, requiere de grandes cantidades de capital humano competitivo que podría proveerlo Sonora.

LA MINERÍA ES CLAVE

El programa “Prosperidad Compartida” 2024-2030 de Sheinbaum define 22 polos de desarrollo como estrategia nacional de relocalización y ahí aparece el Plan Sonora con la etiqueta número 3.

Bajo esta etiqueta se identifican para la entidad dos sectores clave: El energético y el de la electromovilidad-automotriz. Se suma para nuestro Estado otra etiqueta que es la número 5 que conjunta a los valles del Yaqui y Mayo con el Norte de Sinaloa. En este apartado se mencionan como estratégicos a los sectores de la energía y de la agroindustria.

Lo que no se puntualiza en este listado de 22 polos de desarrollo como sector estratégico es al de la minería.

Sonora depende significativamente de esta industria y sus colaterales al igual que Chihuahua, Durango y Zacatecas.

Estas cuatro entidades tienen una vocación minera y la nueva ley las ha puesto contra la pared. El Gobernador Durazo sabe de la importancia de esta industria para la reactivación económica de Sonora y ha salido en su defensa, pero ahora falta que negocie su aparición formal en el proyecto sexenal “Prosperidad Compartida”.

Javier Villegas Orpinela es presidente del Colegio de Economistas de Sonora, director de Correo y Telegrama y profesor en el Departamento de Economía Unison.

jvillegas@correorevista.com

Twitter: @JvillegasJavier

Facebook: Javier Villegas Orpinela

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