Cofepris: 98% de playas mexicanas son aptas para uso recreativo

Costas de México.- La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) recientemente publicó un informe sobre la calidad del agua en las playas de México, justo antes del inicio del periodo vacacional de Semana Santa 2024.

Según el reporte, el 98 por ciento de las playas en México son aptas para uso recreativo, a excepción de algunas ubicadas en Rosarito y Tijuana, Baja California, así como en Acapulco, Tlacopanocha y Carabalí, Guerrero.

Este informe, elaborado en colaboración con las Áreas de Protección contra Riesgos Sanitarios estatales, evaluó la calidad del agua de mar en los 17 estados costeros del país.

Para este análisis, se realizaron muestreos en 289 playas distribuidas en 76 destinos turísticos, lo que implicó un total de dos mil 238 muestras obtenidas en 393 puntos de muestreo.

Aunque el resultado general es alentador, con un alto porcentaje de playas cumpliendo los estándares para uso recreativo, es preocupante que seis playas excedieran los niveles permitidos de enterococos, según los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Playas no aptas

Estas playas identificadas como Rosarito, Rosarito 1, Tijuana, Tijuana 1, Acapulco, Tlacopanocha y Carabalí, representan un riesgo para la salud de los habitantes y turistas nacionales e internacionales.

La Cofepris ha anunciado que, en coordinación con las Áreas de Protección contra Riesgos Sanitarios estatales de Baja California y Guerrero, se están aplicando acciones inmediatas de saneamiento para mejorar las condiciones de estas seis playas y prevenir riesgos a la salud. Es crucial que se tomen medidas eficaces y rápidas para abordar este problema y garantizar la seguridad de quienes visitan estas zonas costeras.

Además, la Cofepris ha puesto a disposición del público los resultados detallados de los muestreos en su sitio web oficial, y ha exhortado a la población a mantener la limpieza de las playas durante la temporada vacacional.

Esta responsabilidad compartida entre autoridades y ciudadanos es fundamental para preservar estos espacios naturales y garantizar que sigan siendo disfrutados de manera segura por las generaciones futuras.