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Plan Nacional de Desarrollo

Hemos comentado en este Ecoanálisis el abandono del medio ambiente por parte del Gobierno Federal. Cómo se han desmantelado las instituciones encargadas de la gestión y conservación ambiental. Las Áreas Naturales Protegidas, ANP, se fueron asfixiando durante el sexenio anterior y en este se les está dando el tiro de gracia. Parques Nacionales, Reservas de la Biósfera y otras, han visto reducido sus presupuestos hasta hacerlas inoperantes.

Existía la esperanza que el nuevo gobierno entrara con fuerza y convicción al tema ambiental pero no ha sido el caso. Y ya lo veníamos venir desde la larga campaña del actual presidente que nunca mencionó al medio ambiente como una preocupación y lo está demostrando con hechos.

Por fin se dio a conocer el Plan Nacional de Desarrollo, de tan sólo 63 páginas a menos que yo haya consultado una síntesis incompleta del mismo, en el que se enuncian ejes y temas centrales de la nueva administración. He escuchado a expertos en el tema en todos los medios de comunicación decir asombrados ¡cómo se les pudo haber olvidado el medio ambiente! No aparece por ninguna parte, las ANP no existen pero además parece haber consigna de desaparecer a las instituciones ambientales mexicanas como la SEMARNAT y sus PROFEPAS, CONAFOR, CONAGUA, etc.

Yo opino que no es olvido, es ceguera o analfabetismo ambiental, o como diría el mexicanito siempre desconfiado, “es plan con maña”. Resulta increíble que en pleno siglo XXI haya personas ciegas que no vean al medio ambiente como el sostén de la vida, la economía, el bienestar ciudadano, el progreso, etc. Esos mexicanos para quienes todo lo es urbano son quienes nos gobiernan hoy. Pero desatender lo ambiental pasa una factura muy cara: la pérdida de la salud. Se ha dicho y nadie lo duda, que la contaminación es esencialmente democrática, pega a todos por igual. No importa la riqueza del individuo siempre respirará el mismo aire envenenado, beberá la misma agua insalubre y estará rodeado de hambrientos, entonces, ¿para qué sirve su riqueza?

Le reducción presupuestal del 30% a la CONAFOR, y del 27% a la Protección Forestal, por ejemplo, las ha frenado para combatir los incendios forestales que todos sabemos ocurren en el centro del país al final de la primavera. Al escribir esto hay más de 200 incendios rodeando a la CDMX y sus suburbios, el resultado es un aire envenenado que azota a todos por igual. El cobro de la factura por desatender lo ambiental llegó muy rápido al nuevo gobierno que tendrá que afrontar las consecuencias. Y esto es sólo el principio, luego llegarán las facturas por abandonar las ANPs, la actualización de las políticas públicas ambientales, la supresión de la investigación científica, las extinciones biológicas, la descalificación global y embargos cuantiosos del ambientalismo internacional por desapariciones como la inminente de la vaquita marina.

“De la integridad del ecosistema depende la calidad de vida humana”, reza la cábula ecológica, y el abandono ambiental confirmará su vigencia más temprano que tarde.

*- El autor es investigador ambiental independiente.