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La agresión racial hacia el migrante

Para quienes vivimos la frontera, particularmente de Baja California, hemos sido testigos en diferentes momentos y formas en que l@s migrantes, ya sean de México o de otros países.

Para quienes vivimos la frontera, particularmente de Baja California, hemos sido testigos en diferentes momentos y formas en que l@s migrantes, ya sean de México o de otros países, transitan por la entidad para cruzar hacia los Estados Unidos por cualquiera de los tres puertos fronterizos que hay, ya fuera por Mexicali, Tecate o Tijuana, en particular es esta última ciudad la que más personas, documentadas e indocumentadas, suelen utilizar para cruzar hacia el lado norteamericano. Es el corredor México-EUA el más transitado, con 1,2 millones de migrantes que anualmente trasponen las fronteras entre ambos países. Ciertamente los flujos migratorios suelen tener sus ciclos y tipos; sin embargo, las últimas migraciones en esta parte del continente han sido notorias por su condición y cantidad y tipo de migrantes, ya fuera la de l@s haitian@s, las provenientes de distintos países Centroamérica, de quienes proceden de Ucrania y recientemente quienes vienen de Venezuela.

En este flujo, las condiciones de tránsito de l@s migrantes son lamentables, pero más se acentúa por el estigma y en muchos casos el desprecio e incluso odio con la que son señalados quienes por razones étnicas, religiosas, económicas o de violencia tienen que dejar su lugar de origen. Esta discriminación, llega a niveles intolerables pues suelen ser vejados, aislados e incluso humillados por su condición de migrante, en ciertos casos se llega hasta la muerte, solo por ser diferente o de piel obscura.

Lo anterior nos conduce a observar con mayor detenimiento a este proceso que reitero no es exclusivo de nuestra frontera, ni tampoco del país, ni reciente. La migración ha sido y es una constante en diversas épocas, ya sea por motivos políticos, económicos, culturales, étnicos o religiosos. En este sentido, cuando una persona percibe que hay riesgo para su vida o la de su familia por las razones antes citadas, y que el Estado es incapaz de ofrecerle seguridad, es altamente probable que migre.

Y a propósito del tema de género y edad, son las mujeres, los niños y también los adultos mayores quienes predominan en la migración; en particular, la mujer migrante es quien más sufre vejaciones, pues suele ser mancillada, humillada y hasta violada por quienes se dedican a tráfico humano o en el caso de los niños, son utilizados para el traslado de droga hacia los Estados Unidos, lo cual en su conjunto genera una escalada de violencia hacia el migrante, no sólo de parte de los servicios de migración de norteamericanos, sino de grupos de vigilantes de la frontera en estados como Arizona y Texas, los cuales hostigan,maltratan, humillan y golpean, hasta asesinan a quienes son migrantes.

Lo cierto es que la migración en esta parte de la frontera norte de México, es una realidad con la cual convivimos diariamente y por supuesto que aprendemos como bajacalifornianos a coexistir con diferentes muestras culturales de personas provenientes de otras latitudes, por lo cual poseemos una enorme mezcla intercultural dentro dela amplia amalgama de orígenes y tradiciones que se manifiestan en el México moderno.

*- El autor es coordinador del Observatorio Global Mediático-UABC.

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