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La Navidad que no pasa

¡Qué pronto pasó la época más bonita del año ¡ Este tiempo tan especial, que nos lleva a sacar lo mejor de nosotros mismos.

¡Qué pronto pasó la época más bonita del año ¡ Este tiempo tan especial, que nos lleva a sacar lo mejor de nosotros mismos, darnos a los demás, perdonar, abrazar, amar a todos, agradecer la vida de los que se han ido, así como de los que aún están con nosotros.

Lo más bonito es entender que el espíritu navideño no es solo para un mes, sino para todo el año. ¿Cuál es? El Amor, no como algo abstracto, sino concreto, el amor a Dios, y en Él, a nuestra familia, amigos, conocidos… el amor al que está en la calle pasando frío, hambre, en un lugar que no conoce, y donde no tiene apoyo. ¿Se han puesto en los zapatos de éstas personas? Es difícil, cuando olvidamos el sentido de un tiempo maravilloso y su significado.

¿Cuál es su significado? Jesús. Él es el verdadero sentido de la Navidad, los regalos, las fiestas, los abrazos, solo son consecuencia del gozo que sentimos al creer que hace más de 2,000 años, Dios envió a su Hijo para nacer del vientre virginal de María, por una sola razón: Por Amor a ti, a mí, a cada uno de nosotros. Y luego, para darnos una lección de vida, permite que nazca, no en un palacio lujoso, acorde a lo que es: El Rey, el Hijo de Dios, sino en un lugar de refugio para animales, sucio, mal oliente, indigno….! Qué gran enseñanza para los hombres!, Aquellos que, cuando obtienen un cargo o sobresalen, se creen dioses; soberbios y arrogantes olvidan que están ahí para realizar un servicio para el bien común, y tener la oportunidad de responder, con resultados y honor a su compromiso.

En un mundo en el que vales por lo que tienes, no por lo que eres, ¡Qué difícil entender el misterio navideño! En un mundo en el que el dinero es su dios y razón de vivir, es imposible penetrar en el gozo del nacimiento del Niño Dios.. En un mundo sumergido en lo superficial, lo externo, lo tangible, es imposible descubrir lo que nos trae este Niño, porque lo impide la codicia, el afán de tener más dinero, más bienes, más placeres efímeros, que duran tan poco….

La época navideña es la mejor época del año. ¿Por qué? Porque nos recuerda que el Amor es nuestra esencia; fuimos creados por el Amor y para amar. Y aunque nuestra vida transcurra en el error, y nuestro egoísmo y soberbia controlen nuestras acciones, en el fondo sabemos que hay Alguien que nos ama, tal cual somos con nuestras fallas, errores, pecados e indiferencia y que aun así, cada Navidad, ese Alguien, sigue esperando humildemente ser parte de nuestra vida. Un Niño indefenso que con su sonrisa, su mirada, sus bracitos abiertos, nos ofrece ese Amor que hemos despreciado, ese perdón tan anhelado, esa auténtica alegría y paz, que aunque pase navidad, nada ni nadie podrá quitarnos.

Recuerda: Jesús no pasó por la chimenea para dejarte un regalo, pasó por la Cruz para darte por amor, si tú lo aceptas, el mejor y más valioso de los regalos: Tu salvación eterna.

*- La autora es consejera familiar.

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