Percepción política

En su libro “Animal Social”, el autor estadounidense David Brooks argumenta que la mayoría de los votantes sabemos perfectamente por quién van a votar, desde antes siquiera de que arranquen las campañas políticas.

Es decir, en teoría, las campañas son para que los votantes tengamos la oportunidad de conocer a los candidatos, de analizar sus perfiles, de revisar sus propuestas, y, de esa forma, el día de la elección, tomar una decisión razonada.

Sin embargo, según el argumento del escritor, también colaborador del The New York Times, la mayoría de los electores no requerimos escuchar a los candidatos en campaña.

En unas cuantas semanas, los bajacalifornianos vamos a decidir quién será nuestro próximo gobernador, ¿ya sabe usted por quién va a votar?

El candidato de Morena, Jaime Bonilla Valdez, el gran favorito en la contienda electoral, maneja dos principales líneas discursivas; curiosamente, cada una centrada en un diferente personaje.

El primer personaje es el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. A pesar de que habían prometido no hacerlo, los candidatos de Morena usan, y usarán cada vez más, el nombre, la figura, las frases y la popularidad del mandatario nacional. Ojalá Bonilla ofrezca más que el nombre del presidente. Ojalá no tome la ruta fácil y se presente únicamente como el discípulo de AMLO en Baja California.

El segundo personaje es el actual gobernador de Baja California, Kiko Vega. En 2018, por obvias razones, Bonilla encontró redituable golpear al mandatario estatal panista, y, en esta elección, el morenista seguirá por el mismo camino.

El candidato del Partido Acción Nacional, Oscar Vega Marín, ubicado en la segunda posición, por lo menos en las encuestas, tiene un discurso políticamente confuso.

Pareciera que quiere separarse del actual gobernador. Pareciera que quiere desprenderse del desgaste con el que cuenta el panismo tras treinta años de gobierno. Sin embargo, como suele pasarles a los candidatos que esto intentan, se queda justo en medio.

Cierto es que Oscar Vega Marín no defiende abiertamente al panismo, tampoco defiende al gobernador, ha repetido hasta el cansancio que no son parientes. Pero tampoco lanza críticas, lo suficientemente agresivas, para suponer una separación, rompimiento o verdadera distancia.

El candidato del Partido Revolucionario Institucional, Enrique Acosta Fregoso, maneja un discurso político anticuado, vacío, pero, sobre todo, un discurso que automáticamente genera desconfianza entre los votantes bajacalifornianos.

“Mi compromiso es contigo”, es el slogan de campaña de Acosta Fregoso. La misma frase que utilizara el ex presidente de México, el más odiado en la historia del país, Enrique Peña Nieto. “Mi compromiso es contigo”, dice el candidato justamente del PRI, el partido político que más desconfianza genera en la población.

Jaime Martínez Veloz (PRD), Héctor Osuna Jaime (Movimiento Ciudadano), Ignacio Anaya (Partido de Baja California), son candidatos que no tienen posibilidades de ganar, pero que sí pueden inclinar la balanza en la recta final.

Y usted… ¿Quién quiere que sea el próximo gobernador de Baja California?

*- El autor es abogado y conductor de televisión.