PAN compra votos ¿para llegar a robar?

Hace algunos días, el 13 de mayo, es decir un día después de que Óscar Vega lanzara su frase matona en el debate, el candidato a diputado del PAN por el distrito XV, y también dos veces alcalde de Rosarito, Silvano Abarca Macklis citó a una reunión secreta a un puñado de sus principales promotores, el objetivo era explicar cómo iban a comprar el voto en ésta ocasión.

Ahí, Abarca se abrió de capa y les hizo la propuesta directa de que por cada 50 votos que le consiguieran a favor de los candidatos del PAN, él les iba a regalar un terreno de 160 metros cuadrados en el Fraccionamiento “Actívate por Rosarito”. Lo único que tenían que hacer los promotores era llenar una lista con 50 nombres y números de teléfono, así como referencias de sus identificaciones y su firma, todo antes del 22 de mayo.

En su discurso, Silvano Abarca precisó que los candidatos a la alcaldía de Rosarito, María Ana Medina y a la Gubernatura Óscar Vega, ya tenían conocimiento de ésta situación y “estaban de acuerdo con ello, es decir”, que de acuerdo con Silvano, el hombre que un día antes había dicho que “el que paga para ganar, llega para robar”, estaba de acuerdo en pagar para conseguir votos a su favor, en otras palabras ¿estaba pagando para llegar a robar?

La compra de votos es una leyenda urbana que cada elección sale a relucir, todos los candidatos y partidos se acusan unos a otros de andar comprando votos a cambio de unos cuantos pesos, despensas, favores o en este caso terrenos. Silvano Abarca ha sido una fichita dentro del PAN, siendo Alcalde también fue acusado de andar regalando terrenos a cambio de votos, también, jovencitas menores de edad lo han señalado directamente de haber sido abusadas sexualmente por él, pero hasta el momento Abarca nunca ha rendido cuentas ante la ley.

Será importante ver qué es lo que hacen las autoridades y los partidos, ante una prueba tan contundente como ésta, pues existe un video donde se observa y escucha a Silvano hablar sobre la compra de votos a cambio de terrenos, hay muchos testigos que hasta el momento aseguran que están dispuestos a hablar, también hay documentos que se repartieron ese día tras la reunión. Únicamente hacen falta valientes que inicien los procesos ante la Fiscalía Especial Para Delitos Electorales y que las autoridades hagan su trabajo.

Mientras tanto, muy seguramente en muchas otras casas en Baja California hay este tipo de reuniones donde algún político de poca monta estilo Silvano Abarca, o alguno de sus achichincles, citan a un grupo de vecinos para ofrecerles el oro, la luna y las estrellas a ciudadanos necesitados a cambio de su voto y el de sus familias. Total, qué importa si Silvano Abarca anda comprando votos y voluntades, mostrando sus prácticas gansteriles, ya se le acusó en 2015 de hacer eso y no pasó nada ¿Ahora va a pasar algo? Lo dudo. Espero que alguien me calle la boca.

*El autor es periodista con 25 años de carrera, ha encabezado noticieros en la televisión internacional; ganó el premio Nacional de Periodismo y ha sido académico.