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La televisión

Casi medio siglo antes de que la televisión se volviera realidad ya era factible su invención, con principios fundamentalmente desarrollados en varios grados en Alemania, Inglaterra, Escocia, Francia, Rusia y Estados Unidos.

Casi medio siglo antes de que la televisión se volviera realidad ya era factible su invención, con principios fundamentalmente desarrollados en varios grados en Alemania, Inglaterra, Escocia, Francia, Rusia y Estados Unidos.

Una de las razones del porqué este aparato apoteótico de la comunicación no se desarrolló más temprano fue que los pioneros de estos países tenían una pobre comunicación entre ellos y otra fue que las ideas estaban más allá de la tecnología disponible en ese momento.

En el siglo XIX personas como W.E. Sawyer, Maurice Leblanc, Paul Nipkow y el ingeniero escoces A. Campbell Swinton estableciendo un método que en sus detalles esenciales fueron las bases al desarrollo de la televisión de la televisión moderna el conjunto de estas brillante ideas hicieron posible que dos décadas mas tardes se pusieran en práctica.

Finalmente el 2 de octubre de 1925 John Logie Baird desde el ático de su casa transmitió una imagen reconocible de la cabeza de un muñeco llamado Bill, ese mismo día un ayudante de su laboratorio fue la primera imagen viva en ser transmitida por televisión. De la noche a la mañana Baird se volvió famoso. En 1927 transmitió de Londres a Glasgow y en 1928 de Londres a Nueva York.

Desde ese entonces y hasta nuestros días, la televisión ha evolucionado tecnológicamente de una manera impresionante, pasamos del sistema análogo al digital y al de alta resolución, ya es posible ver televisión en un reloj, al estilo Dick Tracy, no se diga en los teléfonos celulares ahora llamados Smartphones. Con el tiempo la televisión ha sufrido una metamorfosis rápida y evidente.

Con la cantidad de opciones que tenemos a través de sus varios canales, hoy puede ser “la caja idiota” o la ventana del conocimiento, en ambos casos lo es más por un acto de decisión del propio televidente que de obligación por la escasez de contenido. México en palabras de un fallecido magnate de la industria televisiva, es un país de una clase modesta muy jodida, que no va a salir de jodida.

Para la televisión es una obligación llevar diversión a esa gente y sacarla de su triste realidad y de su futuro difícil.” Nuestros padres solían decir: “apaga eso, te vas a quedar idiota”. Y consideraban a la televisión, entonces, como un instrumento aberrante dedicado a la persecución y aniquilación de neuronas, como una merolica de objetivos oscuros cuyo plan era apartarte de los libros y acercarte a la ignorancia. Algo de verdad había en ese juicio.

El gobierno federal utiliza este medio para llenarte de información no necesaria, con anuncios del Instituto Nacional Electoral, de los partidos políticos, de publicidad oficial, de publicidad al culto personal de ciertos gobernadores (algunos de ellos a diario), para difundir dos o tres meses al día, la mañanera, informes sobre el Covid19, la del bienestar social y todos los anteriores para asegurarse de que los vean y con el pretexto del cambio de tecnología regalaron televisiones a diestra y siniestra, todo con el producto de nuestros impuestos.

A raíz de la pandemia del coronavirus. La SEP dio a conocer que invertirá alrededor de 450 millones de pesos en el proyecto para dar clases por televisión abierta que arrancarán con el programa Aprende en Casa II, y beneficiará a millones de estudiantes a nivel nacional.

Los contenidos serán responsabilidad de la SEP y serán sustentados en los planes de estudio, así como los libros de texto gratuitos. Preguntas que quedan en el aire: ¿Qué pasa con la educación física?, ¿Cómo se evaluará a los alumnos?, ¿Cuál es la participación de los maestros? ¿Cómo solucionar la falta de padres de familia en donde ambos trabajan?

*- El autor es ex presidente de la Federación de Colegios de Ingenieros Civiles de la República Mexicana.

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