El plan para ‘derrocar’ a AMLO

Históricamente, todos los gobiernos que necesitan validarse eligen un villano que servirá para esconder sus deficiencias, desde Egipto con los judíos; los católicos con los musulmanes y las brujas; los norteamericanos con los nazis y los comunistas; en México, Vicente Fox señaló a López Obrador como su enemigo; Calderón al narcotráfico; Peña Nieto, bueno, él era su propio adversario y recientemente el actual Presidente López Obrador decidió “revelar” un documento confidencial donde el plan es “derrocarlo”; pero, es necesario analizar qué tanto hay de cierto y qué tanto raya entre la falacia y la fantasía.

El pasado 9 de junio, el vocero de presidencia Jesús Ramírez difundió un documento de siete páginas con la leyenda “CONFIDENCIAL”, donde se revelaba una serie de acciones y actores de todos los ámbitos sociales en la nación que tenía el Título de “Rescatemos a México”, un proyecto para crear un Bloque Opositor Amplio (BOA) que tiene como intención lograr que Morena no gane las elecciones del 2021 y llegue la alternancia en el 2024.

De manera inmediata las reacciones brotaron más rápido que un virus, la mayoría, si no es que todos los señalados, entre periodistas, artistas, empresarios, medios de comunicación, partidos políticos y otras personalidades, salieron a desmarcarse de la participación en este documento, en redes sociales nuevamente las opiniones se dividieron entre los conocidos “chairos” defendiendo el gobierno de izquierda y los derechistas (mejor ubicados como “fifís”), quienes prácticamente pedían a gritos un sitio dónde firmar para declararse parte de la BOA.

Los memes y sátiras al nuevo monstruo revelado por Obrador tampoco se hicieron esperar, la comparación con el clásico tema de la Sonora Santanera y sus imágenes fueron lo que primeramente se compartió y muy pronto en gran parte del país ya se había polarizado nuevamente gracias al Presidente, antes era “chairos vs fifís”, ahora serán los que están en la BOA vs los que defienden al Presidente, el mismo AMLO salió a decir un día después que había muchos partidos que lo mejor era solo tener dos uno liberal y otro conservador.

Más allá de poner en duda la veracidad o validez del documento BOA, cosa que muchos especialistas han coincidido que prácticamente es una “fake news” puesto que son pocas las pruebas ofrecidas y cualquier estudiante con una PC puede hacer un documento similar, es importante señalar que sea real o no la BOA, lo que si es cierto es que existe una cantidad cada vez mayor de personas que se han opuesto al gobierno de AMLO, lo único que hizo el Presidente es darle un nombre y con ello una identidad, la cual ahora será el objeto de todos los señalamientos.

Sea o no real la BOA como tal, la oposición existe y conforme pasa el tiempo personas que dijeron creer en el proyecto de AMLO se suman a la oposición, no existe ningún estudio serio que afirme que la aprobación del Presidente esté en aumento, sino todo lo contrario, conforme pasan los días cada vez son menos los que creen en López Obrador y los que deciden tomar partido en las decisiones electorales de los próximos años.

Como buen fascista, Andrés Manuel López Obrador al no tener un adversario visible al cuál culpar como lo hicieron sus antecesores, debía darle nombre a todos los esfuerzos (unidos o separados) que buscan a toda costa evitar que el proyecto de la 4T continúe por más años ¿es ilegal? ¡Para nada! Puesto que la BOA es una representación de lo que el mismo AMLO hizo por casi 20 años hasta lograrlo, que es criticar al sistema hasta derrocarlo y ponerse a la cabeza.

Quizás antes no existía un frente como tal, pero ahora tras la presión ejercida por AMLO, tal parece que el frente está conformándose en uno solo y cada vez encuentra más adeptos, de entrada, todos los que han sido perjudicados por las políticas económicas de AMLO, que es casi toda la clase media para arriba, cierto es también que se ve en AMLO una clara preocupación, no de ser derrocado, sino de que su proyecto de nación acabe junto a su mandato el cual parecerá ser otro sexenio perdido.

* El autor es un periodista con 25 años de carrera, ha encabezado noticieros en la televisión internacional; ganó el premio Nacional de periodismo y ha sido académico.