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Difícil la recuperación económica del país

Por muchos esfuerzos que hago por distinguir un panorama más claro y optimista en el futuro de la economía mexicana, no lo logro... 

Por muchos esfuerzos que hago por distinguir un panorama más claro y optimista en el futuro de la economía mexicana, no lo logro, en virtud de que las cosas acusan ponerse más graves y no hay acciones de política pública que apunten en poner un freno a esa tendencia.

Mucho se discutió a principios de este año, si se estaba en una crisis económica o una recesión técnica, como planteaba el secretario de Hacienda, Arturo Herrera. Si agregamos estos últimos dos trimestres consecutivos con tasas de crecimiento negativas a la tendencia que nos arrojó el pasado 2019, con una contracción de .9 por ciento del PIB, es indudable que estamos viviendo la peor Recesión Económica de los últimos cien años, con caída de la economía que se estiman hasta en un 18.7 por ciento según datos de INEGI.

En su momento cuando ya hubo un reconocimiento a que la caída del PIB, (que aunque no le guste al Presidente, es el indicador que tenemos), era un síntoma de que la economía entraba en una verdadera recesión, el propio secretario de Hacienda mencionó que este ciclo de la economía se comportaría en V (Como la palomita de Nike, mencionó) es decir, tendría una caída, pero de manera rápida veríamos una recuperación.

Desafortunadamente esa recuperación no se está logrando y las cosas apuntan a que la contracción de nuestra economía será más prolongada, con una caída que se estima en el peor escenario que plantea el Banco de México 12.8%e

Cabe mencionar y esto es algo que persiste en el ambiente, el Gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, explicó que no tienen un escenario único, sino que se presentan tres escenarios distintos, debido a la incertidumbre generada por el fin de la Crisis Sanitaria Covid-19, y la indefinición que existe sobre el tiempo que esta pueda durar.

Lamentablemente, como en el caso de la Crisis de Salud, donde al principio no se quiso reconocer y se manejaron cifras y pronósticos que fueron rebasados, pero que, desde mi punto de vista no se ha actuado con eficacia y oportunidad.

Así también en el tema de la crisis económica, que ya se veía venir, y múltiples voces lo anunciaban desde el año anterior, hubo resistencia a reconocerlo, llegando a pensar que con la derrama económica que se generaba con los programas sociales, sería suficiente para crecer en medio de la crisis mundial a un 3%.

Se asocia la contracción económica a la crisis sanitaria, en efecto que esta última ha jugado un papel importante en el freno de las actividades económicas, pero tampoco se ha hecho nada para poder frenarla. Hasta el día de hoy, no se conoce un programa especial de Gobierno para promover la inversión, sino todo lo contrario, se han tomado decisiones de política pública que han incidido en la contracción de la inversión privada, aspecto que sería fundamental para reactivar la economía y el ingreso de las familias.

Sin ingreso no hay consumo, sin consumo no hay mercado. Sin inversión no hay empleo y por tanto no hay ingreso. La inversión tanto pública como privada se ha contraído, eso está determinando la contracción de la economía.

Está en puerta la discusión y aprobación del Paquete Económico 2021 para el próximo 8 de septiembre, esperemos con poca esperanza, que ahora si se rectifiquen los criterios de inversión. Un llamado a los Legisladores, para que antepongan su interés particular o de partido para hacer una discusión seria de esta propuesta de Política Económica, privilegiando el interés nacional y promover el desarrollo económico.

*El autor es economista de profesión, fue presidente del Colegio Estatal de Economistas y vicepresidente del Colegio Nacional de Economistas.

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