Testimonio de joven víctima de reclutamiento forzado narra su escape del crimen organizado

Tijuana, B.C.- Se llama “Pepe”, es originario de Michoacán. Actualmente tiene 24 años de edad pero a sus 14 fue reclutado de manera forzada por el crimen organizado.

Durante seis años vendió droga, desapareció a personas, fue halcón, con sus pistolas y camionetas intimidó a los del pueblo.

Pepe obedeció porque los delincuentes lo amenazaron con asesinar a su familia.

Para cumplir las órdenes se alejó de sus seres queridos, quienes por rumores se enteraron que el joven era parte de 'ellos'.

Mundo

Más de 1000 detenidos involucrados en operaciones fraudulentas en Hong Kong

No es un sentimiento muy bonito porque nos obligaban a hacer cosas que realmente no fueron del todo humano. Obligué a mucha gente a que se lastimara a ella misma, tanto mujeres como hombres, de mi misma edad, siempre eran jóvenes de los 14 pa' arriba", contó “Pepe”.

Durante los seis años que fue parte del crimen organizado se acostumbró a generar el miedo de la gente hasta que tuvo un accidente que lo dejó con problemas de movilidad y sus 'amigos' lo dejaron solo.

Actividades delictivas

"Laboré para ellos, pero no tuve apoyos y me dejaron solo. Fue cuando pude ver a mi familia otra vez y me ayudó a poder caminar otra vez, con mis terapias, pero 'ellos' me abandonaron", dijo Pepe.

Te puede interesar: Se presentan días críticos en calidad del aire durante temporada invernal

Tecnología

Descubre el nuevo modus operandi en el que ‘secuestran’ tu WhatsApp

Cuando se alejó de las actividades delictivas nuevamente intentaron reclutarlo, al negarse casi lo matan a golpes pero lo dejaron escapar.

Actualmente Pepe se encuentra en Tijuana en busca del asilo humanitario para su hija, esposa, mamá, hermano y él. Temen que los delincuentes vuelvan a atender contra él.

Te puede interesar: Homicidios Tijuana: Ejecutan a hombre en Campestre Murua

"Esperanza de que me puedan aceptar y que puedan darme una nueva oportunidad para mi familia y a mí.
Me siento aliviado más que nada por mi hija, ya tiene cuatro años cumplidos, gracias a todos es que yo he aprendido a no volverme a involucrarme por gente de esa clase, a dar lo mejor para mi familia y para mí. Pongan más empeño en los jóvenes porque realmente eso pasa diario... normalmente son muchachos que ya tienen familiares dentro del mismo cartel y nomás andan ubicando a jovencitas o jovencitos que tienen problemas familiares, para 'ellos' son un blanco fácil", relató.