La semana pasada en resumen

Algunas noticias de la semana pasada me llevaron a tomar estas notas. Natanael Cano repitió exitoso concierto en Rosarito, parece inevitable tener conciertos que representan una apología al delito, al lujo, a los excesos. Loable decisión del Municipio de Tijuana en prohibirlos. El problema es la demanda, que es generada por los medios, como una mercancía y signo de la forma de pensar de muchos jóvenes que se retroalimentan con estas letras bélicas. Contener a miles de fanáticos del género significa malestar y una pérdida de votos, muy valiente Municipio de Tijuana en pagar el precio. En la plaza de toros más grande del mundo, en la CDMX, se levantó la prohibición con un lleno de 40,000 personas, doscientos manifestantes enojados activaron de nuevo la prohibición, finalmente ayer y hoy sí habrá corrida. Los taurinos también son legiones, una minoría multitudinaria, puede llenar plazas de decenas de miles de asistentes. Realmente hay que meterse en la fiesta para reconocer que no hay tortura y es una ceremonia más que un espectáculo. Nada que ver con las peleas de animales, gallos, perros, o con las de humanos, box, valetodo, allí si se celebra el daño, de eso se trata, de dañar. Entender que en las plazas hay tanto respeto que ya lo quisiera el futbol para un domingo. Argumentar que los toros engendran violencia es una falacia, una paradoja. Es lo contrario, genera valores, como en las religiones, hay que entrar para entender. Los activistas en contra del petróleo, como los animalistas, pueden difundir expresiones absurdas en nombre de un mensaje. Ya todas las obras maestras están bajo cristal para protegerlas de los humanos. Ahora fue la Mona Lisa la que recibió un montón de sopa encima. Todo en nombre de una causa. Se pegan las manos a la pintura, o le avientan líquidos, reclamando atención a la urgencia de responder ante lo que parece producirles más ansiedad, el cambio climático. Son casi los mismos que se ofendieron por la exclusión de las dos principales mujeres de la película Barbie en los Oscar, nominado al actor hombre y la película, pero no su directora. Fui al cine a ver Godzilla Minus One, es de lo mejor que he visto en meses. Los japoneses derrotan a Hollywood, con pocos millones hicieron una superproducción digital genial. Alguien opinó que era la Rosa de Guadalupe japonesa, no me pareció. Lo dramático es característico del Animé, tiene esa estructura y estética, hay que verla en pantalla grande. Sucedió, el primer humano que se conecta a la red con un sensor dentro del cerebro, es un hito, idea de Musk. Lastimosamente reaparece el argumento del segundo tirador de Colosio, una afrenta de la fiscalía. Buena semana.