Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Tijuana

La Responsabilidad Social de las Universidades

Hace unos días me invitaron a un Simposio sobre Responsabilidad Social Educativa organizado por la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).

Hace unos días me invitaron a un Simposio sobre Responsabilidad Social Educativa organizado por la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG); un tema que pareciera estar muy claro para todos pero que, a todas luces, tiene un largo camino por recorrer todavía.

Y es que Responsabilidad Social no es solo firmar cheques y donar el dinero a causas sociales, las universidades están en una posición única para servir como catalizadores de un verdadero cambio social.

El Simposio tuvo conclusiones muy interesantes: Antonio Leaño Reyes, rector de la UAG, y otros líderes educativos destacaron sobre cómo las instituciones educativas deben esforzarse por transformar el conocimiento en impacto social, enfatizando la formación integral de los estudiantes que abarque no sólo lo académico, sino también el deporte, artes y habilidades blandas.

Una de las sentencias más claras del evento la planteó el Dr. Fernando León García, Rector del sistema CETYS Universidad, cuando subrayó la importancia de formar líderes capaces de navegar en un mundo en constante cambio y que la responsabilidad social “no es opción” para las instituciones de educación superior. Así de claro.

Además, las relaciones entre las universidades y otros sectores es clave para enfrentar los retos del hoy y del mañana. Así lo dijo el director para México del programa Universia Santander, Arturo Cherbowski, sobre cómo la colaboración externa potencia la misión social de las universidades y deja en evidencia que ellas solas no pueden con los retos. Vinculación, vinculación y más vinculación.

Ahora bien, ¿dónde creo que están las áreas de oportunidad para atender urgentemente? En tres.

1. Autocrítica Interna: Las universidades deben fomentar una cultura de reflexión y evaluación para identificar y rectificar prácticas desactualizadas o ineficaces, asegurando que su enfoque educativo se mantenga relevante y beneficioso para la sociedad.

2. Colaboraciones Externas: Establecer relaciones colaborativas con entidades externas para trabajar en proyectos que aborden problemas sociales reales, permitiendo una aplicación práctica del conocimiento académico.

3. Extensión Comunitaria: Implementar programas que conecten a la universidad con la comunidad local, permitiendo a los estudiantes y profesores aplicar su conocimiento y habilidades en proyectos que beneficien directamente a la sociedad.

Las universidades no están solo para dar clases, sino que son un bastión para inculcar valores cívicos, impulsar la justicia y catalizar la innovación ante los dilemas de hoy y mañana. Las universidades no están aquí solo para moldear el futuro; tienen el mandato inmediato de responder al presente, contribuyendo activamente al bienestar colectivo y al avance sustentable de la sociedad. ¿Nuestras universidades en México están realmente atendiendo el hoy? No creo y creo que debe preocuparnos a todos.

*- El autor es Director de Testa Marketing.

En esta nota