Lex Tributum

"¿Qué confianza puede tenerse ni qué protección encontrarse en leyes que dan lugar a trampas y enredos interminables, que arruinan a los pleiteantes, engordan a los curiales y facilitan a los Gobiernos el cargar impuestos y derechos sobre las disensiones y pleitos eternos de sus súbditos?" Barón de Holbach El Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, anunció dentro de los primeros días de su administración presentaría ante el Congreso la “Ley de Confianza y Responsabilidad Ciudadana”, con la que pretende eliminar las inspecciones federales en establecimientos mercantiles, así como a los auditores en materia fiscal, esto con la supuesta finalidad de eliminar la corrupción. Así las cosas, López Obrador resaltó que la Ley busca confiar en el ciudadano, ya que únicamente le requeriría una manifestación de cumplimiento de las leyes en materia de sanidad, hacendaria y de protección civil. Algo muy parecido como lo que sucede con nuestro país vecino. En ese orden de ideas, el nuevo titular del ejecutivo federal menciono que, todas las personas propietarias de un negocio o empresa, tendrían la obligación de registrarse para hacer su manifestación de responsabilidad, y pasado un año, se realzarán sorteos del 1% del padrón para llevar a cabo, por parte del gobierno y en colaboración con cámaras empresariales, una inspección a dichas empresas para constatar que cumplan con sus obligaciones de carácter administrativo y fiscal. Al parecer dicha legislación contendrá sanciones para los empresarios que no cumplan, o en su caso si cumplen, recibirán un reconocimiento por parte de la Presidencia de la República y también en el Diario Oficial de la Federación. Según el senador Ricardo Monreal, quien fue el que presentó la iniciativa, la Ley busca fomentar la cultura de la legalidad como eje rector del desarrollo económico, generar un entorno de confianza basado en el cumplimiento voluntario de obligaciones regulatorias y fiscales, con el objetivo de reducir la corrupción. El citado legislador puntualizó, que para poder acceder a los beneficios que tendrá, la ciudadanía únicamente deberán inscribirse voluntariamente al Padrón Único de Fomento a la confianza, su registro será considerado como un acto de buena fe por el cual dará a entender al Estado que ha cumplido con todas sus obligaciones fiscales y regulatorias; por lo que a cambio podrá recibir los beneficios y facilidades que establezcan los programas. Por último, al parecer en cuanto a los beneficios del IVA e ISR (8% y 20%, respectivamente) en la frontera estos solo se obtendrán si los contribuyentes se inscriben a un padrón regido por la presente legislación. Esperemos ver el paquete económico. Todo indica que dichos beneficios fiscales vendrán como decreto y no como Ley. *- El autor es abogado fiscalista.