Carlos Loret de Mola

Quién iba a pensar que lo de Miss Universo iba a tener tantos efectos.

El dueño de Miss Universo puede entrar a México, caminar tranquilamente por el país, acudir a algún restaurante de lujo y destapar una botella de vino cara.

Hace poco más de un mes, se gestó desde Palacio Nacional un intento para remplazar al titular de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero.

Poco a poco, sin hacer aspavientos en la escena nacional, los rivales políticos del gobernador de Sinaloa han ido desapareciendo de la escena.

Cuando brota una crisis, la presidenta “jala la marca”, como se diría en el argot futbolístico.

Desde hace cuando menos cinco meses, el gobierno federal tiene identificados y ubicados a los líderes del llamado “Bloque Negro”.

Entre mayo y noviembre de 2012, miles de jóvenes salieron a las calles de la Ciudad de México para protestar. El movimiento “Yo Soy 132” hizo marchas, plantones y manifestaciones.

La presidenta parece frustrada porque nadie le cree que su estrategia de seguridad está funcionando.

El régimen quiere adelantar un año la consulta para ratificar o revocar el mandato de la presidenta Sheinbaum.

No le gusta que le digan autoritaria, pero ahí están sus reformas. No le gusta que le digan intolerante, pero cuando se le critica, enfurece.

El de Claudia Sheinbaum se llama “Plan Michoacán, por la Paz y la Justicia”. El de Peña Nieto se llamó “Plan Michoacán, juntos lo vamos a lograr”.

No sé cuántas veces pidió auxilio Carlos Manzo. “Hago un llamado a la presidenta…”. En internet una búsqueda sencilla arroja decenas de declaraciones del alcalde de Uruapan suplicando apoyo.

¿Quién les hizo creer a los campesinos que sin maíz no hay país, que habría soberanía alimentaria, y hoy están bloqueando carreteras porque no les cumplieron?

Hace un mes, el gobierno de Estados Unidos detuvo a uno de los hombres supuestamente más buscados por el régimen. Apenas nos enteramos.

López Obrador solía poner a Ricardo Salinas Pliego como ejemplo de un empresario que “tiene dinero, pero también tiene dimensión social”.