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Historia y vida de uno de los responsables de la construcción del Aeropuerto de Hermosillo

El proyecto del aeropuerto de Hermosillo ha sido de gran importancia para el desarrollo cultural, social, económico y político de la ciudad, además de haber mejorado en parte la calidad de vida de la población, generando empleos y desarrollo

El Aeropuerto Internacional de Hermosillo es un edificio con el que todos los hermosillenses estamos familiarizados; algunos lo frecuentan más que otros, pero todos en algún momento hemos pisado o pisaremos el suelo del edificio de donde entran y salen una gran cantidad de aviones nacionales e internacionales diariamente.

El proyecto del aeropuerto de Hermosillo ha sido de gran importancia para el desarrollo cultural, social, económico y político de la ciudad, además de haber mejorado en parte la calidad de vida de la población, generando empleos y desarrollo, como menciona Irving Vásquez en su proyecto escrito "Aeropuerto de Hermosillo".

Sin embargo, poco se sabe de la historia de cómo el aeropuerto que conocemos se fue "gestando", sobre todo desde una perspectiva más personal y más humana.

El ingeniero Octavio Contreras Esparza, quien fue el encargado de la Residencia de Hermosillo de la Dirección General de Aeropuertos para la construcción del aeropuerto, llegó a la ciudad de Hermosillo en el año de 1972, lo que marcó el inicio de un gran cambio para su vida y su carrera.

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Ing. Octavio Contreras Esparza

En la Edición No. 30 de la revista de construcción "Incide", fue homenajeado como persona del mes en el año 2002, donde dedicaron un par de páginas para publicar una autosemblanza en la cual describió parte de su historia y trayectoria.

Octavio Contreras Esparza (OCE, como le gustaba firmar), nació un 11 de mayo de 1931 en la Ciudad de México, sitio donde también realizó todos sus estudios, destacando sus estudios profesionales en la Escuela de Ingeniería Civil de la UNAM.

Según él mismo describe, vivió de una forma modesta durante su infancia y juventud; su madre se hacía cargo de las tareas domésticas y del cuidado de él y sus hermanos, mientras su padre trabajaba en Ferrocarriles Nacionales de México en la Cdmx con un sueldo no muy alto, lo que implicó grandes sacrificios para que los hijos del matrimonio pudieran superarse estudiando y trabajando.

Vida laboral

Desde una juventud muy temprana, Octavio comenzó con pequeños trabajos dentro de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP), la cual, según narra, fue cambiando de nombres durante varias ocasiones, siendo hoy conocida como la SCT.

Con trabajo y esfuerzo logró ayudar al mantenimiento de su casa, así como también pudo pagarse sus estudios en el ámbito que tanto le apasionaba y disfrutaba: la construcción. Esto (los estudios y los trabajos que realizó desde muy joven) le aseguró estabilidad dentro de la Secretaría, lo que le permitió ir escalando en puestos más altos en la Dirección General de Aeropuertos.

Fue ahí cuando su situación económica comenzó a mejorar, ya que lo convirtieron en Residente General de Aeropuertos en ciudades como Matamoros, Tamaulipas; Culiacán, Sinaloa; Puerto Vallarta, Jalisco y Loreto, Baja California. Todo esto antes de llegar y establecerse en Hermosillo.

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Familia

Durante su estadía en Matamoros fue que conoció a su esposa, la Lic. en Psicología María Guadalupe Elena Haro Y Fragoso (Lupita), quien nunca se separó de su lado hasta el final de sus días.

Según él mismo narra, Lupita trabajaba en una constructora y fue así como la conoció. Comenzaron a tener amistad, para luego llegar al noviazgo. El proceso para casarse también ocurrió muy rápido, debido a que sus trabajos en el aeropuerto eran rápidos, ya que se trataba de la construcción de pistas y no tenía idea de adónde lo cambiarían.

Por eso mismo, le pidió a un amigo suyo que lo acompañara a pedir la mano de Lupita, teniendo sólo 9 meses de conocerse.

Afortunadamente, ella aceptó", menciona OCE.

Se casaron en noviembre de 1966 y en el siguiente cambio de residencia se fueron juntos con destinto a Culiacán. De ahí atravesaron juntos todos los cambios mientras su familia iba creciendo.

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Destino: Hermosillo

Llegaron a la Ciudad del Sol en 1972, primero él y, ya instalado, se trajo a Lupita y a sus hijos. Octavio cuenta que, aunque a él sí lo movían por comisiones en otras ciudades, su familia ya no se movió de Hermosillo, pues sus hijos ya estaban realizando sus estudios de primaria, secundaria y preparatoria y, tanto él como su esposa, consideraban que la escuela debía significar algo estable para ellos.

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Aeropuerto de Hermosillo

Cuando OCE y su familia llegaron a Hermosillo, el ingeniero vino con la tarea de supervisar la obra de la reconstrucción de pistas, además del mantenimiento requerido para calles de rodaje, plataforma, etc., del aeropuerto que ahora se conoce como "el edificio viejo", que se encuentra a un costado del edificio hoy en funcionamiento.

Una vez comenzado ese proyecto, como la Dirección General de Aeropuertos comenzó a crecer más, se les pidió a los mismos trabajadores que realizaban las pistas en ese momento, tanto la constructora como la Secretaría a cargo de la supervisión, comenzar con la construcción del nuevo edificio, así como torre de control, del Aeropuerto Internacional de Hermosillo General Ignacio Pesqueira García.

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Anécdotas

Entre algunas de las anécdotas que el Ingeniero Contreras Esparza compartió referentes a la construcción del aeropuerto, una de ellas mencionaba que las pistas se trabajaron, en varias ocasiones, de noche y madrugada, para no interrumpir los vuelos que había de día.

Así mismo, recordó que a veces se tenía que estar espantando al ganado de las pistas cuando iban a aterrizar los aviones. Además de otras historias como bodas y celebraciones que se daban afuera del aeropuerto viejo para despedir a algunos novios, lo cual provocaba que se llenara de gente que cargaba con barriles de cerveza y adornos graciosos.

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Actualmente, el Aeropuerto Internacional de Hermosillo "recibe varios vuelos domésticos así como los vuelos a las ciudades de EE.UU. de Los Ángeles y Phoenix. El aeropuerto es un punto importante para Aeroméxico Connect, quién maneja cerca de 50 vuelos comerciales diarios a destinos dentro de México y Estados Unidos", menciona la página oficial del Grupo Aeroportuario del Pacífico.

Su trabajo y su memoria siguen vigentes

Así como fue la persona a cargo de la reconstrucción de pistas y edificios de varios aeropuertos del país, además de ser quien inició desde cero el actual aeropuerto de Hermosillo, Octavio Contreras también realizó otras obras de importancia, como algunos tramos de carreteras, recarpeteos y, posteriormente, trabajar en obras algo grandes para Coapaes, lo que hoy se conoce como Agua de Hermosillo.

Dentro del gremio de constructores, su trabajo sigue vigente y se le recuerda como un gran ingeniero, amigo y persona. Aunque en aquellos tiempos no existía un acceso sencillo para reconocer a personas como OCE, en esas páginas de la revista "Incide" su trayectoria está inmortalizada, recordado como una persona honesta y trabajadora, además de haber sido un gran esposo, padre y "elo" para su familia.

Un día como hoy, 9 de julio, pero de 2011, durante una madrugada lluviosa, el ingeniero Octavio Contreras Esparza perdió la batalla contra el cáncer, pero es recordado como una persona que no perdió la fuerza en ningún momento y mantuvo el sentido del humor hasta el último de sus días.

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"A los jóvenes les puedo decir, si están trabajando del lado del Gobierno, que cuiden las obras como si fueran para ellos propiamente, y que les exijan a los contratistas lo mismo", menciona en un apartado dirigido a los jóvenes constructores. "La honestidad es indispensable. Sólo siendo honestos tendrán abiertos los caminos; una persona deshonesta luego luego se conoce, pero una persona honesta también, y ésta tendrá abiertas las puertas toda su vida... La honestidad es la base de todo".

Octavio Contreras fue responsable de varias construcciones en el país, algunas del estado de Sonora, y aunque hoy en día sólo viva en la memoria de sus más cercanos, la importancia de su trabajo sigue y seguirá vigente para el futuro.

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