Cerro de la Campana

Los lamentos, indignación, reclamos y cuestionamientos a la estrategia de seguridad se han escuchado en México y a nivel internacional por la violencia imparable en el País que no ha podido ser controlada.

Aún sigue la condena nacional por lo ocurrido en Chihuahua con el asesinato de dos sacerdotes jesuitas y un guía de turistas en un templo de Cerocahui, en la Sierra Tarahumara cuyos cuerpos fueron tomados por los criminales el lunes y ayer fueron recuperados.

Además, aún siguen desaparecidos cuatro turistas. Al presidente Andrés Manuel López Obrador, especialistas, dirigentes políticos y otros sectores le piden una revisión a su estrategia de seguridad.

“El Gobierno federal hoy tiene que hacer una autocrítica responsable, porque su estrategia, si es que la tiene, no está sirviendo de ningún modo”, dijo Juan Luis Hernández, rector de la Universidad Iberoamericana de Torreón, Coahuila.

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Desde El Vaticano, en su audiencia de los miércoles, el papa Francisco externó su dolor por el homicidio de los jesuitas Javier Campos y Javier Mora, además del guía turístico Pedro Palma, y su expresó: ¡Cuántos asesinatos en México! Esa misma expresión la tienen los mexicanos cuando no se observan resultados a pesar de que sexenio tras sexenio se despliegan estrategias nuevas y se repiten las declaraciones de echarle la culpa a su antecesor y con fórmulas matemáticas aseguran que la tendencia va a la baja, pero los homicidios dolosos siguen y entre ellos están las víctimas inocentes.

Del lado del Gobierno federal se ha hecho el despliegue de más de 250 militares en la Sierra Tarahumara, el ofrecimiento de recompensa de 5 millones de pesos a quien ofrezca información del criminal presuntamente ligado con el hecho. Además del papa Francisco, la Compañía de Jesús, el arzobispo Rogelio Cabrera y el obispo Ramón Castro, presidente y secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, y el padre David Beaumont, vicario episcopal de los Pueblos Originarios de la Diócesis de Ciudad Obregón, Sonora, oraron por las víctimas y recordaron la vida misionera de los sacerdotes asesinados.

La agenda de igualdad de género, libertad de expresión y la defensa de derechos humanos reunió ayer a embajadores y representantes diplomáticos de la ONU, Estados Unidos, Canadá, América Latina y Europa con el gobernador Alfonso Durazo Montaño.

El encuentro fue ayer en Palacio de Gobierno se habló principalmente de acciones para empoderar a las mujeres y crear condiciones para ello, además de fortalecer a las mujeres que se desarrollan en el activismo social, la defensa de derechos humanos y el periodismo desde diversas militancias.

Esto forma parte del trabajo de la Mesa de Cooperación Internacional para la Igualdad de Género en México que ayer tuvo a los diplomáticos de países como Finlandia, Países Bajos, Chile, Colombia, Noruega, Alemania, Canadá, Reino Unido, Uruguay y Suiza, así como de la Organización de las Naciones Unidas. Como lo habían anticipado los priistas si aceptaba el puesto de cónsul de México en Barcelona, ayer decidieron expulsar a la ex gobernadora Claudia Pavlovich de las filas de su partido.

Así el Comité Ejecutivo Nacional del PRI determinó dar de baja a Pavlovich Arellano como lo hizo con el ex gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz, hoy embajador de México en España, por haber aceptado cargos del Gobierno federal emanado de Morena.

La decisión de los ex gobernadores de Sonora y Sinaloa de irse como diplomáticos fue cuestionada por la militancia priista ya que ellos no pudieron refrendar en sus estados los triunfos en la gubernatura para el priismo puesto que en ambas entidades ganó Morena.