Generación Touch

Los españoles, durante la Conquista, trajeron la religión católica a México y una forma de mostrarla fue con la escenificación de la vida, muerte y resurrección de Jesucristo, en la Semana Santa. Aquí en Sonora, como en otros estados, también fue transmitida la religión católica, en la que se recuerda que Jesús estuvo 40 días en una montaña, manteniéndose en ayuno. Nosotros. durante ese periodo de 40 días, hacemos lo que se conoce como “Cuaresma”, que comenzamos con el Miércoles de Ceniza y es la época en que algunas culturas indígenas se disfrazan de bestias salvajes que representan pecadores dirigidos por Poncio Pilatos, un rey que quiere matar a Jesús. Las personas disfrazadas son llamadas fariseos o chapayecas, como es conocido entre los yaquis, ellos recorren las calles pidiendo dinero para mantenerse durante este tiempo, porque dejan de trabajar, y bailan alegremente usando como parte de su disfraz una máscara que mientras la usan no podrán dormir en cama. Al llegar al final de esos 40 días, transcurre una semana que conocemos como la Semana Santa, y llega el momento en el que los fariseos son azotados para pagar sus pecados, después se realiza el Víacrucis, en el que se representa a Jesús cargando la cruz en la que es crucificado y nosotros velamos su cuerpo hasta el Sábado de Gloria, cuando los fariseos son perdonados y se deshacen de sus máscaras, las cuales queman en una hoguera para así festejar hasta el mediodía del domingo, que Jesús ha resucitado. En Hermosillo existen algunos asentamientos de la tribu Yaqui, en donde celebran esta tradición, entre ellos La Matanza, El Coloso y La Revolución. Distinguir a los fariseos de Hermosillo de los otros que vienen de Sur del Estado es fácil, porque los de la capital acostumbran poner pezuñas en su cinturón y tienen prohibido, por los jefes de su tribu, entrar a bailar al Centro de la ciudad. Te recomiendo que durante la presente Cuaresma y Semana Santa, hagas el propósito de visitar estos lugares y conozcas más de nuestras tradiciones.