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El Imparcial / Mexicali / Día de Muertos

El nuevo pan de muerto con ceniza

A través de los años lo han ido innovando en su elaboración, sabor e imagen.

El pan de muerto es un alimento muy tradicional en México, consumido entre los meses de octubre y noviembre por la fecha en que se conmemora a los fieles difuntos.

A pesar de ser muy conocido por su peculiar sabor a naranja a través de los años lo han ido innovando en su elaboración, sabor e imagen, tal es el caso del pan de muerto con ceniza.

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Carolina Gaytán tiene tres años realizando pan dulce para su venta, sin embargo, le gusta darle un toque diferente a los panes tradicionales, en específico a los que son de temporada.

La preparación del pan de muerto es un trabajo más complicado a diferencia de otros panes dulces debido a que lleva elementos muy específicos que son tradicionales mexicanos como la naranja y la flor de azahar.

Precisamente la flor de azahar solamente se da en estas fechas, la cual crece dentro del árbol del naranjo, dándose la fruta del nombre homónimo.

La idea de hacer el pan de muerto de ceniza nace de otra panadería que se ubica en la Ciudad de México, la cual ha vuelto muy famoso dicho pan, hasta el punto de ser replicado por Carolina en esta ciudad fronteriza.

“Esa idea me gustó mucho y pues quise implementarla, se hicieron las pruebas, se hicieron varios métodos para lograr las cenizas del color específico, en los tiempos y todo”, comentó Carolina.

El pan muerto de ceniza ha causado muchas especulaciones entre las personas sobre su origen, hay quienes creen que viene de las cenizas de los difuntos, pero la realidad es que la ceniza proviene del totomoxtle.

El totomoxtle es la hoja del maíz, la cual la compran recién cortada para dejarla secar alrededor de una semana, después la hornean de seis a siete horas logrando quedar completamente color negra para que pueda ser pulverizada.

Ya que el pan está frío después de hornearse, se le hace el baño de mantequilla con una brocha o se puede introducir todo a la mantequilla derretida, para agregarle una mezcla de azúcar con ceniza, la cual quedará completamente pegada al pan.

Para darle el famoso sabor a naranja se compra a naranja, para rayarla en pedazos muy finitos, después se hace jugo para agregarlo al pan.

Además, una de las innovaciones que le realizaron al pan de muerto fue rellenarlo con la mezcla de dos cremas que realiza Carolina, la cual tiene un ligero sabor a vainilla.

“Es un proceso bastante largo porque es hacer la ceniza, debido a que usamos los ingredientes naturales, entonces todo eso pues toma tiempo, si tenemos como dos semanas preparándonos para sacar el pan esta semana”, finalizó Carolina.

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