No queremos el comodato

Por el derecho a la libertad de expresión

Antes de que se inaugurara como Eufrasio Santana, era solo el campo de futbol del rastro municipal. Allí jugábamos los tecatenses en la Liga Municipal de Fútbol, que, desde los años de 1960 en adelante, lográbamos a lo máximo seis equipos completos. Los campeonatos eran todo un acontecimiento que lograba reunir a muchas familias, que asistían a apoyar a sus hijos, pero, también, para ser testigos de los esfuerzos de los tecatenses empeñados en fomentar el deporte. El campo del rastro, como le decíamos, era un sitio llanero, sin cerco, sin barda, sin ningún techo que protegiera a los asistentes de las lluvias o del viento.

Posteriormente, los gobiernos municipales construyeron diversos espacios, como gradas, canchas de básquetbol, de vólibol, de tenis, una alberca y otros sitios más. El tiempo y los esfuerzos de las administraciones le agregaron tartán y pasto artificial, mismo que en estos días está en muy malas condiciones. Sin embargo, la ubicación del Eufrasio Santana es ideal, pues es céntrica, próxima a la línea internacional y rodeada de calles pavimentadas y de colonias más o menos tranquilas. Allí concurrimos personas desde la cinco de la mañana y hasta las nueve de la noche, a practicar algún deporte. En los veranos hay clínicas para niños de primaria, que, atendidos como un campamento de verano, son muy frecuentados.

Bueno pues, ahora resulta que el gobierno de Román Cota, Presidente Municipal de Tecate, quiere darlo en comodato al grupo de Los Xolos de Tijuana. De hecho, la discusión ya se está dando, y es muy probable que ya haya fecha para llevar la propuesta a votación al Cabildo. A la población no se le ha informado cuáles son las condiciones que le darán vida al comodato, si se firma, pero hay preguntas que deben responderse e informarse de ellas a los ciudadanos. Por ejemplo ¿Podremos los tecatense utilizar el campo como lo hacemos ahora? ¿Seremos obligados a cumplir con requerimientos de la empresa? ¿Existirá la posibilidad de que nos impongan una cuota monetaria? ¿Cerrarán con una barda las instalaciones? ¿Los Xolos determinarán que pasará, en todas las instalaciones deportivas del Eufrasio Santana? ¿Tendremos horarios definidos para practicar nuestra disciplina deportiva?

Un comodato, es un instrumento legal que tiene cláusulas que hay que cumplir, con tiempos definidos y obligaciones mutuas. Por supuesto que la empresa está buscando un beneficio económico, pues nadie da nada gratis. De la misma manera, la inversión que tiene planeado llevar a cabo, les debe redituar una ganancia y la van a tener, le pese a quién le pese.

La actitud de cabildo municipal debería ser en el beneficio general de los tecatenses, pero las administraciones municipales se guían por los intereses político- partidarios y estando tan cerca el período de las precampañas, eso también es definitorio al tomar decisiones. Por consiguiente y dada la información histórica que tenemos del cabildo municipal, con el caso de Iberparking, por ejemplo, el voto no será por el beneficio de los deportistas, sino por cuánto podrán ganar con el voto por los Xolos. Por otro lado, el prestigio de los dueños de los Xolos no es el más limpio posible.

Si han estado involucrados en varias situaciones con la justicia, habría que pensarlo dos veces antes de hacer un compromiso legal con ellos. En lo personal creo que el Ayuntamiento de Tecate, debería buscar recursos estatales y nacionales, que puedan aplicarse a la Unidad Deportiva Eufrasio Santana, para que se quede en poder de la ciudad. Podría llevarse a cabo una encuesta que, con mucha seguridad, definiría que los tecatense queremos el Eufrasio Santana como propiedad de la ciudad, y proponerle a los Xolos, que construyan, desde los cimientos el campo que andan buscando, y que llene sus expectativas. Vale.

*- El autor es licenciado en Economía con Maestría en Asuntos Internacionales por la UABC.