Fenta y sobredosis en Ceresos

Ya ni siquiera es un secreto a voces entre custodios, autoridades carcelarias e internos y sus familias que el tráfico de drogas en los cinco Ceresos de Baja California se convirtió en un negocio redituable, ahora es una información que se esparce rápidamente de manera abierta para que incremente la venta de drogas, especialmente heroína y fentanilo.

Las drogas y alcohol siempre se han comercializado en los centros penitenciarios de todo el país. No es nada nuevo. Pero, lo que sí es nuevo es que nuestras cárceles (pues se mantienen con recurso público millonario) han terminado siendo “picaderos” institucionalizados.

La corrupción y falta de transparencia en el Sistema Penitenciario de Baja California no ha cesado; con todo y los esfuerzos del Comisionado Jose Gabriel Galvez y de su equipo cercano con Marcos Alvarado Silva y Luis Alberto Machado, de maquillar las cifras y embellecer su trabajo con notas afines, pues hace dos semanas permitieron el ingreso de medios de comunicación para simular que había apertura y que todo estaba en regla.

Las denuncias internas por actos de corrupción en los centros penitenciarios se incrementaron, especialmente lo que sucede en lo que apenas hace una década era uno de los cinco mejores cárceles de mediana seguridad como es el Penal de El Hongo, que hoy se encuentra hundido en los últimos cinco lugares.

De acuerdo a información obtenida por Lindero Norte, recientemente se armaron operativos, uno de ellos en varias celdas de El Hongo, en donde sorprendieron al interno Adán Montiel con un celular marca Samsung por el que había pagado a los mismos custodios y administrativos la cantidad de 20 mil pesos. Cuando le ordenaron cambiarse de estancia, por la que también había pagado, se negó, por lo que los oficiales lo comenzaron a golpear en presencia del Subdirector del penal de apellido Domínguez. La brutalidad de los custodios hizo que Adán no pudiera caminar, pero lo más grave fue que le perforaron un pulmón.

Adán se encuentra intubado en el cuarto piso del Hospital General de Tijuana. El problema se les complicó a las autoridades carcelarias porque el interno sentenciado pidió el apoyo consular de los gringos ya que es Ciudadano Americano. En tanto, médicos del HG de Tijuana lo están drenando por el exceso de sangre acumulado en cuerpo.

Otro de los graves problemas en el Cereso del Hongo son las sobredosis y muertos por consumo de Fentanilo y Heroína. De manera ilegal, las autoridades no envían estos cadáveres al SEMEFO porque los certifican como muertes naturales por paro cardíaco sin importar que los internos no presentaban enfermedades.

El miércoles 29 de octubre murió un interno por sobredosis de heroína en el Edificio H9 y el jueves 30 de octubre falleció también por sobredosis de drogas duras un hombre en el edificio H10.

Las sobredosis por el consumo a granel de fentanilo y heroína en El Hongo vaen aumento, tan solo el día 26 de octubrehubo 5 personas privadas de la libertadcon sobredosis en el segundo nivel del Edificio E (que es de mínima seguridad). Estasno murieron gracias a que los custodios ylos mismos internos cuentan con Naloxona, sí, gracias a organización religiosasestadounidenses que donan el medicamento “Narcan” para los PPls que se “doblan”,como se dice a las sobredosis en la jergacarcelaria.

Hubo otro interno muerto en el Edificio H5 y otro por asfixia por sobredosis enel edificio H7, quien había estado hace dosmeses en el H10. Pidió su cambio por temasde seguridad, le pedían 40 mil pesos paramandarlo de vuelta a su sección. A los díasmurió en extrañas circunstancias. En eldictamen médico únicamente señalan quese broncoaspiró y le dio un ataque al miocardio. Además, que en su organismo no seencontró rasgos de alguna sustancia ilegal.

REFLEXIÓN EN VOZ ALTA: Otro delos graves problemas que se presenta en ElHongo desde hace casi 3 años es que variasmuertes por sobredosis son internos queno consumían drogas, por lo que los fallecimientos se tuvieron que investigar como Homicidio por parte de la Fiscalía del Estado.

*- El autor es periodista de Baja California.