Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

Aplicar el civismo a diario

Esta semana me han llegado videos y artículos relacionados con el Civismo.

Cosme Collignon

Esta semana me han llegado videos y artículos relacionados con el Civismo, inclusive en algunas pláticas con amigos hemos tomado el tema, en ocasiones recordamos el libro de texto de Civismo, una materia que se eliminó como tal y se incorporó, según la SEP en Ciencias Sociales.

Pero vamos viendo de dónde procede la palabra civismo, según la Real Academia Española pro provienen del francés Civisme y este del latín Civis que signif ica ciudadano, y el francés isme – ismo. Una definición de civismo que me pareció adecuada para incluir es: “El civismo se basa en el respeto hacia las otras personas de la comunidad y hacia las cosas compartidas”.

El respeto hacia otras personas de la comunidad, qué importante es esto, vienen a mi memoria algunas reglas que se han perdido en Baja California, por ejemplo, en 1974 que conocí Tijuana, al cruzar una calle me esperaba a que no pasara ningún auto, una persona que estaba junto a mí descubrió que no era de Tijuana, me dijo “aquí respetan a los peatones”. Efectivamente, en cuanto esta persona bajo al arroyo de la calle los vehículos se detuvieron y le concedieron el paso, momento que aproveché para cruzar. Esto es civismo.

En cuanto a Civismo como materia educativa se nos enseñaba el respeto a los símbolos patrios, así en todas las escuelas del país los lunes había honores a la bandera, se cantaba el himno nacional y después ingresábamos a las aulas con la marcha de Zacatecas.

El respeto a los demás era una educación que se impartía en las familias, pero también era importante la convivencia barrial para el cuidado de calles y parques, ahora no pasa porque vemos infinidad de productos de desecho en calles, lotes baldíos y parques. Nuestros padres nos indicaban que no debíamos tirar basura en las calles, pero eso se ha perdido.

Sobre el Civismo y su vida en los salones de clase pues les comento que Luis Echeverría Álvarez, presidente de México de 1970 -1976, realizó una reforma educativa en la que integró el civismo en las Ciencias Sociales, por primera vez. Además de los honores a la bandera se enseñaban “buenos hábitos”. También Carlos Salinas de Gortari hizo su reforma para incluir la materia de Civismo, en esta ocasión le incluyó temas como los derechos humanos.

El primer presidente panista, Vicente Fox Quesada, eliminó en 2002, nuevamente, el Civismo y Ética como asignaturas separadas. En el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa se pensó que volver a incluir la materia de Civismo como un elemento de prevención de violencia y de las adicciones, según declaró la entonces secretaria de Educación, Josefina Vázquez Mota, por supuesto que dijo que era una instrucción presidencial, se dice que hasta problemas hubo para imprimir los libros de texto de civismo.

Con el gobierno de Enrique Peña Nieto se reintrodujo la materia de Educación Cívica y Ética en 2014. Andrés Manuel López Obrador retomó la idea de poner en marcha la incorporación de las materias de Civismo y Ética y actualmente el civismo es parte de la asignatura de Formación Cívica y Ética, con un enfoque renovado que incluye valores ciudadanos, cultura de la paz y respeto a los derechos humanos.

Insisto, hay actividades que nos podrían ayudar a ser mejores ciudadanos como no desperdiciar el agua, barrer el frente de nuestras casas, no tirar basura en calles y parques, no subir la voz en hospitales o espacios públicos, respetar a los adultos mayores, dar el paso a personas mayores o mujeres embarazadas, respetar los estacionamientos para discapacitados, respetar al peatón entre otras actividades. Fomentar el Civismo y Ética, ¿no creen?

*- El autor es periodista independiente.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí