¿Y las gasolineras para cuando?

La red de huachicol en Baja California está más enraizada de lo que las autoridades nos han dicho, pues prácticamente las investigaciones de la FGR, PEMEX, Secretaría de Hacienda y de la Secretaría de Seguridad Pública de Harfuch son incipientes y con la opacidad disfrazada de “sigilo de la investigación”. Si en estos expedientes judiciales no hay corrupción por omisión o encubrimiento, estamos frente al nicho de dinero sucio que ha resultado muy redituable para empresarios y para el crimen organizado. Sí el huachicol fiscal no es nuevo en la entidad, solamente porque el tema nunca se ha puesto en el debate público, porque hay muchos beneficiarios.

El huachicol comenzó con las “ordeñas” de los ductos de PEMEX para sustraer el combustible y revenderlo rebajado con algún aditivo o sustancia, ahora, este delito considerado como grave mutó a ser un contrabando de combustibles con una compleja operación en la que participan, el crimen organizado (principalmente un Cártel), despachos contables, empresarios gasolineros, agencias aduanales, y agentes o directores de las garitas, toda vez que se se vende al mayoreo el diésel que cruzan las fronteras de Estados Unidos sin pagar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).

De acuerdo a informacion publicada por el Diario El País , este contrabando técnico de combustibles denominado “Huachicol Fiscal” generó un boquete financiero provocado por la importación ilegal de gasolinas y diésel por el orden de 93 mil millones de pesos en 2018, y en el último sexenio se duplicó a 177 mil millones de pesos, según la consultora Petro Intelligence.

Especialistas en la materia han advertido públicamente que solo el 5% de las importaciones de combustibles son revisadas físicamente en aduanas y en estos lugares carecen de tecnología suficiente para realizar análisis químicos y verificar su autenticidad.

En los últimos 4 meses, en los municipios de Ensenada, Tecate, Playas de Rosarito y Mexicali se ha registrado importantes e inéditos operativos de autoridades federales con decomisos de millones de litros combustible, aseguramiento de maquinaria que van desde bombas para despachar gasolina, contenedores, cisternas y hasta tractocamiones, aunado a los predios que también fueron asegurados y que están bajo el resguardo de la guardia nacional.

El más importante fue el de inicios de marzo con el decomiso de 8 millones de diésel en la Delegación El Sauzal, en Ensenada. Este operativo dio origen a las investigaciones que tiene la Fiscalía General de la República, pues no era para menos, en el lugar, ubicado sobre la Carretera Escénica, se localizaron 46 remolques cisterna, con capacidad de 31 mil litros cada uno, tractocamiones, motobombas y diversos equipos utilizados para el trasiego ilegal de hidrocarburos.

La FGR amplió las líneas de investigación dando con varios predios en otros municipios. Sin embargo, lo más relevante es que entre los nuevos objetivos de las indagatorias figuran grupos gasolineros, como aquel en el que principalmente las personas despachadoras son mujeres, cuya empresa es una de las marcas con mayor presencia en el noroeste del país con más de 70 estaciones en Baja California, Sonora y Sinaloa.

Las autoridades también investigan lapresunta vinculación del predio con el exsenador morenista Gerardo Novelo, quien actualmente cuenta con un amparo, así comocon Luis Torres, cuya relación con el casotambién está bajo revisión.

Omar García Harfuch calificó el decomiso como uno de los golpes más importantescontra el mercado ilegal de combustibles enel noroeste del país. Afirmó que las investigaciones siguen activas y podrían derivar enacciones judiciales contra empresarios y políticos involucrados.

Justamente, lo que nos preguntamos periodistas y la sociedad en general es: ¿a dónde va a parar todos ese combustible que ingresan vía terrestre y marítima por laafronteras de Baja California?. ¿Por qué después de los decomisos de los últimos meseshubo escasez de Diésel?

Claro, no hay que ser Sherlock Homes para identificar que los empresarios gasolineros y sus estaciones de huachicoleo “legal”se hicieron millonarios con la impunidad deeste delito que ahora también es investigadopor agencias de seguridad de Estados Unidos.

*- El autor es periodista de Baja California.