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El caldo y las albóndigas 

En la época de crisis por la que atravesamos es evidente que la creación de una dependencia y burocracia siempre hará mucho ruido.

En la época de crisis por la que atravesamos es evidente que la creación de una dependencia y burocracia siempre hará mucho ruido.

Por eso se ve como una verdadera necedad que los regidores aprobaran la creación de una nueva delegación municipal, como es la del Centro Histórico.

Por qué crear la delegación número 14 en Mexicali (habían quedado 13 luego de que el puerto de San Felipe se convirtiera en municipio), considerando la actual crisis por la que atraviesa la capital del estado y por supuesto todo el país.

Cada demarcación depende cien por ciento de la dirección de Delegaciones, una dependencia que no tiene autonomía, recursos, infraestructura suficiente para atender las necesidades de la población que representa.

Por esta razón, la creación de una nueva delegación en estos momentos es más perjudicial que benéfica, ya que en lugar de ayudar a las colonias que contempla, podría afectarlas. Al menos que las autoridades tengan otros datos y se les quiten recursos a otras zonas para dárselo al Centro Histórico.

Y es que al ser delegación se desprende de su responsabilidad directa el ayuntamiento, con lo cual podría afectar el área que aglutinará.

Habrá que recordar que las delegaciones no tienen recursos, los delegados no tienen poder ni los toman en cuenta para nada, los directivos y los presidentes municipales los ven como administrativos y recolectores de recursos, ya que para todo lo que piden, sólo les dicen que gestionen dinero para lograrlo.

Así, con el excesivo burocratismo que hay, una inoperante dirección de delegaciones, a quienes les dejan poco margen de maniobra, los encargados de las demarcaciones se reducen a figurines que no pueden arreglar ni banquetas o prestar un servicio adecuado a la población.

Las delegaciones cuentan con maquinaria propia, pero los respectivos directores de Delegaciones se las llevan, en muchas ocasiones a otras demarcaciones, por lo que dejan desprotegidos a los delegados y a los ciudadanos.

Incluso en diversas ocasiones se ha propuesto a la sindicatura que revise en dónde está el equipo de cada delegación para darse cuenta que no se localiza donde fue asignado.

El Km 43, Ciudad Morelos, González Ortega son delegaciones muy importantes y Los Algodones es una demarcación única, tiene importante frontera, con más de 10 mil turistas diarios, pero su equipo como recolectores, pipas, barredoras las mueven a donde quieren los directivos, sin respetar su supuesta autonomía y propias necesidades.

No debería haber 14 delegaciones, deben de ser sólo las del valle para que alcance más presupuesto, nos comentan.

Es decir, quienes han estado al frente de este tipo de dependencias nos explican que debería haber una disminución a once, lo cual sería perfecto.

Proponen que las circunscripciones de González Ortega y Progreso tengan un encargado de despacho pero con respaldo del Ayuntamiento y no de una dirección.

Por lo pronto quienes impulsan la nueva delegación comentan que esto servirá de apoyo para lograr un verdadero rescate del Centro Histórico de Mexicali, que es el proyecto que se impulsa desde la administración municipal.

La verdad sea dicha

* La autora es directora del portal MF Noticias Mexicali.

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