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Punto Norte

“Las flores de esta tierra no son nuestras, nos las han prestado para el gozo de los que han de venir”. Algo así dice Nezahualcóyotl (el poeta, no el constructor). Calexico nos pone el ejemplo en el rescate del medio ambiente. En sus parcelas se genera energía limpia, solar y eólica, y en los próximos meses van a incorporar el Río Nuevo a la vida comunitaria. El pasado domingo, La Crónica publicó un reportaje de Saúl Martínez, en el cual se da a conocer que a lo largo de los márgenes del Río Nuevo de la ciudad de Calexico, se construirán ciclovías y un parque lineal. En la nota se informa que en 1999, se formó un comité de residentes de esa ciudad, con el fin de buscar alternativas para erradicar la amenaza que representa la contaminación del Río a la salud de los calexiquenses. El proyecto contempla la instalación de una planta de tratamiento de agua, la colocación de una criba para detener las toneladas de basura provenientes de Mexicali y la construcción de una zona de áreas verdes y humedales. En el plan trabajan los tres órdenes de gobierno, y a pesar de los problemas para recabar los fondos para su financiamiento, se espera que en el 2017 concluya la rehabilitación del “New River”. Es alentador leer este tipo de noticias. Es bueno saber que también de este lado, algunas organizaciones como el Sonoran Institute, Pronatura o Bionero, e incluso algunos diputados, como Rosy Peralta, colaboran en distintos proyectos de conservación y rescate del medio ambiente. El flujo pulso en el Río Colorado, la limpieza del Dren Reforma, la reforestación de la Laguna México, son esfuerzos incipientes, pero muy importantes, de lo que se puede hacer en favor de la ecología y la salud pública. Esfuerzos a los que se deben sumar los mexicalenses, quienes no pueden ni deben acostumbrarse a vivir, o a sobrevivir, en una de las ciudades más sucias y contaminadas del mundo. La basura es parte del paisaje y del entorno mexicalense. La vemos con indiferencia en los drenes, en las lagunas, en los canales, en los caminos, en los desiertos. La basura y la contaminación forman parte de nuestro diario acontecer. A pie, en autobús o en automóvil se pueden observar los basurales dispersos por doquier. Basura multiforme y multicolor arrojada en drenes; basura que envenena aves, peces y anfibios: aceites, bolsas y botellas de plástico, animales muertos, escombro, muebles viejos… La basura se convirtió en parte de nuestras vidas, de nuestra cotidianidad, de nuestros sueños. Nos hemos habituado a ver, respirar y comer desechos. La comunidad y autoridades de Calexico nos ponen el ejemplo. No quieren que por su ciudad sigan corriendo aguas negras que deberían ser grises, aguas contaminadas que atentan en contra su vida. Van a trasformar los márgenes de uno de los ríos más contaminados del mundo, en áreas verdes y de descanso. Un río cuyas aguas deberían ser grises y que hemos pintado de negro. Refilón: Elvira Luna Pineda “Cascabelera” le puso el cascabel al PAN… ¿Loco o patriota?: Felipe Daniel Ruanova Zárate ya superó las 11 mil firmas de apoyo… Gustavo Sánchez: Lo cobijan la vieja guardia del PAN y los “gatos peludos”… *El autor es columnista y periodista local, comentarista editorial.

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