Brasil y México llaman al diálogo para evitar un conflicto armado entre Estados Unidos y Venezuela mientras la ONU y potencias como Rusia y China entran en la discusión

Los presidentes de Brasil y México, Luiz Inácio Lula da Silva y Claudia Sheinbaum, expresaron su preocupación por el aumento de la presión militar y económica de Estados Unidos sobre Venezuela y ofrecieron mediar para evitar un conflicto armado en América Latina. La postura fue expuesta este jueves y forma parte de un repaso semanal de la actualidad internacional publicado por distintos medios de comunicación de Suiza, que dieron seguimiento a la creciente tensión regional.

El llamado ocurre en un contexto de escalada, luego de que el presidente estadounidense Donald Trump endureciera las medidas contra Caracas con el bloqueo de buques petroleros sancionados, mientras el gobierno venezolano llevó el caso al Consejo de Seguridad de la ONU. La crisis ya involucra a potencias como China y Rusia y ha reavivado el debate sobre el intervencionismo en la región.

¿Qué está pasando entre Estados Unidos y Venezuela?

En los últimos meses, Washington ha incrementado la presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro. Esta semana, el presidente Donald Trump anunció el bloqueo de buques sancionados que transporten petróleo desde y hacia Venezuela, una decisión que se suma al despliegue militar estadounidense frente a las costas venezolanas en el mar Caribe.

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El gobierno de Estados Unidos acusa a Maduro de encabezar un cartel de tráfico de drogas y ha justificado sus operativos navales como parte de la lucha contra el narcotráfico. De acuerdo con reportes oficiales, los ataques a embarcaciones en el Caribe y el Pacífico han dejado al menos 99 personas muertas.

Caracas, por su parte, sostiene que estas acciones buscan derrocar al gobierno venezolano y apropiarse de sus recursos energéticos.

La ONU entra en escena: ¿qué se discutirá?

Ante el aumento de la tensión, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas se reunirá el próximo martes, a solicitud del gobierno de Venezuela.

La petición fue respaldada por China y Rusia, aliados estratégicos de Caracas, para discutir lo que califican como “la agresión en curso de Estados Unidos”. El objetivo, según el gobierno venezolano, es frenar una escalada que podría derivar en un conflicto de mayores dimensiones.

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Brasil ofrece mediación para evitar una guerra regional

Desde Brasilia, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó estar “muy preocupado” por la crisis venezolana y subrayó el papel que Brasil debe asumir en la región.

Brasil tiene mucha responsabilidad en América del Sur”, afirmó durante una rueda de prensa.

Lula reveló que a principios de mes sostuvo una conversación telefónica con Donald Trump, en la que le advirtió que la situación “no iba a resolverse con disparos” y que era preferible “sentarse en la mesa para hallar una solución”.

También señaló que habló recientemente con Nicolás Maduro y ofreció la disposición de Brasil para mediar entre ambas partes con el fin de “evitar un conflicto armado en América Latina”.

Estoy a disposición tanto de Venezuela como de Estados Unidos para contribuir a una solución pacífica en nuestro continente”, afirmó el mandatario brasileño.

Y no descartó volver a comunicarse con Trump antes de Navidad.

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Rechazo al intervencionismo y llamado al diálogo dice Sheinbaum

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se sumó al llamado a la vía diplomática y defendió una postura de no intervención.

Vamos a buscar con todos los países que así lo deseen de América Latina o de otros continentes (…) una solución pacífica y que no haya intervención”, declaró durante su conferencia matutina.

Sheinbaum señaló que el fondo del conflicto es el intervencionismo y el injerencismo, que, advirtió, podrían derivar en un enfrentamiento directo entre Estados Unidos y Venezuela.

Hay todos los mecanismos establecidos por Naciones Unidas para que haya una solución pacífica a cualquier disputa y tienen que participar todas las partes”, agregó.

Rusia también llama a la moderación

En paralelo, Rusia confirmó que mantiene contacto constante con el gobierno de Venezuela y exhortó a Estados Unidos a actuar con prudencia.

El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso pidió a la Casa Blanca “no permitir un error fatal” y abstenerse de profundizar una situación que, advirtió, podría amenazar “a todo el hemisferio occidental con consecuencias impredecibles”.

¿Qué intereses están en juego en Venezuela?

Más allá del discurso oficial, Lula da Silva planteó dudas sobre los verdaderos intereses de Washington en el país sudamericano.

No puede ser solo la cuestión de derribar a Maduro. ¿Cuáles son los otros intereses que desconocemos?”, cuestionó.

Entre las posibles motivaciones mencionó las reservas petroleras venezolanas, consideradas de las mayores del mundo, así como minerales estratégicos y tierras raras.

Maduro inició en enero su tercer mandato de seis años, tras ser declarado ganador de las elecciones presidenciales de 2024, un proceso que no fue reconocido por gran parte de la comunidad internacional, incluido el propio gobierno de Brasil.

La postura de México y Brasil busca evitar que la crisis escale a un conflicto armado con impacto regional. Mientras el Consejo de Seguridad de la ONU se prepara para discutir el caso, la comunidad internacional observa con atención si el camino será el de la diplomacia o el de una confrontación de consecuencias aún inciertas.

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