Netzah Yehuda: ¿Qué se sabe de la unidad de las FDI ‘violenta y agresiva’ que Estados Unidos piensa sancionar?
El batallón ha estado envuelto en controversias.
La administración de Estados Unidos está deliberando sobre la imposición de sanciones a una unidad específica de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), conocida como Netzah Yehuda, tras informes de presuntas violaciones de derechos humanos contra civiles palestinos en Cisjordania. Las discusiones, que se han intensificado en las últimas semanas, se originan en incidentes anteriores al conflicto en Gaza en octubre.
Netzah Yehuda, establecida para fomentar el reclutamiento de judíos ultraortodoxos en el IDF, ha sido objeto de escrutinio por su presunta participación en graves violaciones de derechos humanos. La administración Biden está considerando sanciones bajo la “Ley Leahy”, una legislación de 1997 que prohíbe la provisión de fondos a unidades de seguridad extranjeras implicadas en tales violaciones.
El batallón ha estado envuelto en controversias, notablemente el incidente de 2022 que involucró la muerte de Omar Assad, un residente palestino-estadounidense, en circunstancias controvertidas. Assad, de 80 años, murió después de ser detenido a la fuerza y dejado expuesto durante la noche en un sitio de construcción cerca de un puesto de control en Cisjordania. A pesar de la investigación de las IDF y la destitución de dos oficiales subalternos, no se tomaron acciones legales.
¿Cuál es origen de Netzah Yehuda?
Netzah Yehuda, originalmente Nahal Haredi, fue establecida en 1999 para integrar a jóvenes ultraortodoxos en el IDF, permitiéndoles mantener observancias religiosas. Sin embargo, la composición de la unidad, que incluye miembros de orígenes desfavorecidos y colonos de “juventud de las colinas”, ha generado preocupaciones sobre su conducta.
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Los colonos de “juventud de las colinas”, nacidos y criados en puestos de avanzada ilegales en Cisjordania, a menudo participan en actos de violencia contra palestinos como parte de la “política del precio a pagar”, destinada a disuadir la intervención gubernamental en la expansión de los asentamientos.
Aunque las IDF sostienen que Netzah Yehuda opera dentro de límites éticos y legales, persisten las acusaciones de mala conducta. Las posibles sanciones estadounidenses prohibirían la transferencia de armas estadounidenses o asistencia militar a la unidad, señalando un alejamiento del apoyo tradicional de Washington a la seguridad israelí.
La perspectiva de sanciones ha generado fuertes reacciones de funcionarios israelíes, incluido el primer ministro Benjamin Netanyahu, quien se opone vehementemente al movimiento. Los críticos argumentan que sancionar una unidad del IDF sería sin precedentes y podría tensar las relaciones entre Estados Unidos e Israel.
A pesar de las garantías de cumplimiento del derecho internacional, el escrutinio continuo subraya las complejidades en torno a las operaciones del IDF en los territorios ocupados y los desafíos para garantizar la rendición de cuentas en zonas de conflicto.
Artículo original publicado en The Conversation
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