Paramédico sentenciado por inyectar dosis letal de calmante absuelto de ir a prisión

DENVER, Estados Unidos.- Un juez en Colorado dictaminó este viernes una sentencia de cuatro años de libertad supervisada para el paramédico Jeremy Cooper, condenado por homicidio negligente tras administrar una dosis letal de paliativo a Elijah McClain en 2019, un joven afroamericano de 23 años.

Cooper, de 49 años y miembro del Departamento de Bomberos de Aurora, es el último de tres acusados en ser sentenciado por este trágico suceso.

Anteriormente, el policía Randy Roedema fue condenado a 14 meses de prisión, mientras que Peter Cihuniec, otro paramédico, pasará cinco años tras las rejas.

El episodio tuvo lugar el 24 de agosto de 2019, McClain volvía tranquilamente a su casa tras comprar helado cuando fue interceptado por la policía local en Aurora tras una denuncia anónima. Los agentes sometieron por la fuerza al joven, esposándolo y restringiéndolo en el suelo.

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Posteriormente, los paramédicos llegaron al lugar y le administraron ketamina, una dosis excesiva que lo dejó en estado vegetativo. McClain falleció seis días después.

Repercusiones y nuevas investigaciones

Inicialmente, se determinó que la causa de la muerte de McClain era “indeterminada”, lo que desencadeno protestas en Denver y Aurora. Sin embargo, el caso fue reabierto en junio de 2020 por orden del gobernador Jared Polis.

Las nuevas investigaciones, concluidas en septiembre de 2022, revelaron que la víctima “recibió una dosis intramuscular de ketamina superior a la recomendada para su peso” y que además “casi no respiraba” cuando fue trasladado a la unidad médica.

El caso McClain generó cambios importantes en las leyes de Colorado y ha impulsado reformas policiales, especialmente en respuesta a las protestas por justicia racial tras el asesinato de George Floyd.

Por ejemplo, ahora la policía tiene prohibido el uso de ketamina y de diagnosticar a una persona resistente como “delirio excitado” durante un arresto.

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La madre de Elijah, Sheneen McClain, expresó su descontento con la sentencia, afirmando que la justicia “no se ha cumplido completamente”, dado que otros dos policías y otro paramédico de Aurora fueron declarados no culpable, aunque reafirmó su confianza en que la justicia divina prevalecerá.