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Trepados en el poder

Cuando yo era un chamaco, allá por los rumbos del norte del  municipio de  Cuquío Jalisco, hacienda de El Vallado, había dos formas de treparnos en algo y una vez arriba aquello era muy cómodo y disfrutable. Una forma: horquetarnos en la rama de algún árbol y el viento era tan grato que ya no nos queríamos bajar. La otra, montar en el lomo de un caballo y una vez arriba del animal podíamos incluso echados hacia atrás, dormitar.

Trepados en el poder

Cuando yo era un chamaco, allá por los rumbos del norte del municipio de Cuquío Jalisco, hacienda de El Vallado, había dos formas de treparnos en algo y una vez arriba aquello era muy cómodo y disfrutable. Una forma: horquetarnos en la rama de algún árbol y el viento era tan grato que ya no nos queríamos bajar. La otra, montar en el lomo de un caballo y una vez arriba del animal podíamos incluso echados hacia atrás, dormitar.

Por algo será que los niños que padecen alguna discapacidad sus papás los llevan a que den un paseo montados en algún alazán o tordillo, y este paseo les produce, de acuerdo con los especialistas en el tratamiento de estos infantes una evidente felicidad.

Pero no nos hagamos bolas. Montar un caballo no es lo mismo que treparse al poder, que también sin duda debe producir un enorme placer, simplemente por el sueldo que perciben estos políticos desvergonzados. Ahora nos han salido con que de acuerdo con los cambios que han realizado a la Constitución del estado e incluso en la federal, estos impúdicos legisladores, síndicos, alcaldesas y alcaldes, pueden lograr un periodo más en la siguiente elección, sin separarse del cargo que hoy ostentan. Cinismo más yo no puedo concebir. Descaro más es muy difícil de entender. Se requiere tener el cerebro en su sitio para medir con absoluta precisión la desvergüenza de “estos cuates”

¿Sabe usted qué significa esta frase de, “estos cuates”? Nada hombre, es de los borrachos de barriadas, es todo.

Desde que llegó Morena al poder han hecho cambios a la Constitución, primero federal y de inmediato en los estados en que ellos gobiernan. Nunca en los gobiernos del “morenismo” se habían parecido tanto al PRI en su tiempo de la “Dictadura perfecta”, de acuerdo con las palabras del escritor, Mario Vargas Llosa. En realidad, en Morena se ejerce una dictadura perfecta, es innegable. Llegaron al poder con absoluta mayoría de ciudadanos que votaron por ellos. Yo incluso voté por Obrador ¿Hoy me arrepiento? No, pero el México al que aspiro, se aleja de lo que este comentador siempre ha defendido: el liberalismo económico. No al estatismo; no al poder en un solo hombre; no a la incondicionalidad hacia el presidente de todos sus funcionarios, incluyendo sus delegados regionales; por algo será reconociendo siempre en: “primero los pobres”; pero pobres son y han sido a la vez, cientos de miles de mexicanos que urgen del empleo, de trabajar; pero se tira a la basura casi mil empleos de la cervecera o incluso, el aeropuerto de Santa Lucía lo están construyendo el ejército, de acuerdo con las palabras del propio presidente Obrador.

Miles de obreros de la periferia de la Ciudad de México les urge trabajar; las fuentes de empleo del liberalismo económico están congeladas. ¿Y primero los pobres? ¿ En dónde queda la letanía de los morenitas al respecto? Si no se privilegia el empleo, seguirán los miles de mexicanos buscándolo en California o en USA. Así es la cosa de simple. Legislar para treparse en el poder…; un saludo a nuestros diputados, síndicos y alcaldes, de Morena, claro.

* El autor es artista plástico.

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