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Segunda alternancia

Sin duda alguna la contundente victoria (carro completo: gubernatura, alcaldías y diputaciones) que se llevó Morena en las recientes elecciones encabezada por Jaime Bonilla es un antes y un después en la historia política de Baja California. 

"Las oportunidades también

tienen fecha de expiración"

Anónimo



Sin duda alguna la contundente victoria (carro completo: gubernatura, alcaldías y diputaciones) que se llevó Morena en las recientes elecciones encabezada por Jaime Bonilla es un antes y un después en la historia política de Baja California.

Con el arribo al poder de la opción opositora, por un lado culmina una era de 30 años consecutivos de gestiones panistas que iniciaran en 1989 siendo la primer gubernatura precisamente de oposición que ganaba una entidad de la República dando inicio a la transición democrática por la que ha caminado el país a lo largo de las últimas 3 décadas, y , por el otro, abre una muy interesante oportunidad para quienes recibieron en las urnas la confianza y el mandato ciudadano respecto a pasar del dicho al hecho a la hora en que se asuma la alta responsabilidad que significa dar resultados siendo gobierno, más aún cuando se tiene la inmejorable circunstancia de contar con mayoría en el Congreso del Estado a la par de los cinco gobiernos municipales, lo que en sí mismo implica cómodo margen de operatividad y gestión de gobierno.

En este contexto, no podemos dejar de advertir la penosa realidad de que una vez más quedó claro que el abstencionismo sigue marcando la pauta pues apenas se presentaron a las urnas el 30% de los posibles electores. Hecho irrefutable que dice mucho sobre el hartazgo ciudadano y la necesidad que tenemos por revertir tal apatía en el entendido de que lo único que fomenta es precisamente la proliferación de más gobiernos incompetentes que a su vez produzcan más lejanía de la sociedad civil conformándose un círculo vicioso al cual no se le ve salida.

Ahora bien, volviendo al hecho que significa el arribo de Morena al poder en nuestro estado, la circunstancia inédita que representa el hecho de que la gubernatura que encabezará Jaime Bonilla será por un periodo de dos años, amerita el que como nunca antes, desde el primer día, la conformación de su proyecto de gobierno a la par de su equipo de trabajo, implementando ideas y perfiles que compaginen con la realidad de que serán 24 meses de gestión en donde se tendrá que sentar el claro precedente de que se puede hacer un gobierno que aspire a ser refrendado en las elecciones del 2021.

En este sentido, Bonilla, una vez obtenido el triunfo, ha dado muestras positivas respecto a la claridad que tiene por dar muy pronto buenos resultados.

Destacaría, en el ámbito de los nombres, la intención (no confirmada aún) de integrar al ex Senador de la República Amador Rodriguez Lozano a su equipo de trabajo en una de las posiciones más relevantes del gabinete.

Tiempos traen tiempos...

Ha llegado la hora de observar y evaluar la manera en que nuestras próximas autoridades ejerzan el poder, para, luego entonces, juzgar con argumentos y sin apasionamientos su labor.

En la medida en que sociedad y gobierno nos respaldemos y nos exijamos será el tamaño de nuestros resultados en el entendido de que cada quien debe asumir su responsabilidad y procurar un entorno de entendimiento como plataforma mínima de donde partir si es que queremos ser parte de la solución y no del problema...





*El autor es editorialista local/consejero CDEM.