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Las caravanas de migrantes

El sábado pasado en la ciudad de Tijuana se realizó un acto de unidad nacional para celebrar que entre México y los Estados Unidos habían llegado a acuerdos para evitar la imposición de aranceles a los productos mexicanos.

El sábado pasado en la ciudad de Tijuana se realizó un acto de unidad nacional para celebrar que entre México y los Estados Unidos habían llegado a acuerdos para evitar la imposición de aranceles a los productos mexicanos. Se nos vendió la noticia como un triunfo rotundo del Gobierno de México en contra de la amenaza perpetrada por Donald Trump. La realidad es que no hay razón para celebrar y echar las campanas al vuelo, lo que si se logró para los ciudadanos que habitamos en la frontera es que el peso se recuperó. Sin embargo, no han quedado claros los arreglos a los que llegaron, mientras que Marcelo Ebrard, dice que fue un triunfo y que se evitó una catástrofe económica por el impacto de los aranceles en la estructura económica de México, en tanto que el presidente de E.U. declara que hay otros elementos que no se han revelado y que tienen que ver con decisiones que deben tomar los legisladores mexicanos.

Entonces, o el gobierno mexicano nos está ocultando información o es parte de la estrategia de Trump para tener sobre las cuerdas al gobierno mexicano. En lo que sí coinciden distintos analistas políticos y expertos en relaciones internacionales es que se vulneró la soberanía mexicana porque los norteamericanos impusieron su voluntad, ya que nuestro país, tendrá que salvaguardar la frontera sur, distrayendo de sus habituales funciones a 6,000 soldados para evitar que los centroamericanos ingresen al país de manera ilegal y los que lo hagan legalmente tendrán que acatar nuestras leyes. Además, México se comprometió a recibir 8,000 migrantes que regresará EUA, y les deberá dar asilo en todos los sentidos, casa, comida, empleos, oportunidades, con cargo al erario público de nuestro país.

Así mismo, cualquier extranjero que entre por territorio mexicano de manera ilegal, para pedir entrada a EUA, deberá ser retenido en México, con todas las facilidades, y los cargos serán pagados por México, por todo el tiempo que dure el proceso de admisión o rechazo de esos migrantes, por el tiempo que sea, un año, o más. Otro de los arreglos es que nuestro país se comprometió a adquirir más productos estadounidenses. El acuerdo establecido tiene un periodo de vigencia de 90 días y los norteamericanos estarán evaluando diariamente los avances de las retenciones que realice el gobierno mexicano. En resumen, este acuerdo nos condicionó a placer del gobierno norteamericano. En caso de no cumplir con lo acordado, el gobierno de Trump volverá a la cargada y continuará con su amenaza de incrementar el 5% a los aranceles.

Al decir de muchos, el proceder de México es indigno, para la historia de las relaciones internacionales, nunca ningún país extranjero había tenido la osadía de imponer por la vía de las amenazas ningún acuerdo, ningún tratado, creo que México ha perdido mucho. La diplomacia mexicana está de luto. Nuestro país había sido en el pasado un referente obligado al cual todos los países del mundo le tenían respeto. Hoy que tenemos un gobierno de la 4ta. transformación y un presidente que se equiparaba con los grandes héroes de las justas revolucionarias de las etapas de la Independencia, Reforma y Revolución, ha quedado en un remedo de gobierno el cual se agacha ante la falta de capacidad diplomática. Otros sostienen la tesis de un arreglo entre AMLO y Trump, para que Trump se reelija, tal como sucedió en su primera campaña que le funcionó el atacar a México y expresarse muy mal de los mexicanos y el beneficio para AMLO sería la consolidación de su imagen, arengando a las masas en los mítines tratando de unificar aquello que nos divide en una sociedad de Fifis contra chairos. El populismo en ambos países a su máxima expresión.









*El autor es economista egresado de la UABC