Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Mexicali

Cerrar todo por Coronavirus… ¿otra vez?

Algunas de las personas que sufren accidentes muy fuertes, pero que afortunadamente resultan intactos, generan una especie de síndrome bajo el cual se sienten inmortales, todopoderosos.

Algunas de las personas que sufren accidentes muy fuertes, pero que afortunadamente resultan intactos, generan una especie de síndrome bajo el cual se sienten inmortales, todopoderosos. La lógica que sigue el subconsciente es la siguiente: “Si estuve en tan aparatoso accidente y no tuve ni un rasguño, seguramente puedo enfrentar todo tipo de riesgos y nada me pasará”.

Esta semana, nuestras autoridades dieron a conocer que si Mexicali continúa con la tendencia de contagios de Covid-19, conocido popularmente como Coronavirus, algunos negocios que ya reabrieron sus puertas se verían obligados a cerrar de nuevo.

¿Otra vez? Sí, otra vez. Justo cuando pensábamos que veíamos la luz al final del túnel, resulta que podríamos regresar al periodo donde todo estaba cerrado y obligatoriamente debíamos permanecer todo el tiempo en casa.

Naturalmente, el posible nuevo cierre podría significar el fin para un número importante de restaurantes, cafés, bares, gimnasios, entre muchos otros. Sabemos que varios no sobrevivieron a la primera ola de Covid-19. Pero la mayoría de aquellos negocios que sí lograron aguantar el primer cierre, no podrán ser capaces de soportar una segunda clausura. Abrir unas cuantas semanas, ¿para volver a cerrar? Es la receta al desastre.

¿Quién tiene la culpa de esto? Me encantaría culpar a la clase gobernante, y, claro está, ellos tienen una parte de la culpa, la responsabilidad es compartida. Sin embargo, y este sin embargo es con letras mayúsculas, justo es mencionar que los principales responsables somos nosotros, los ciudadanos. Lo cierto es que nos confiamos. Lo cierto es que nos relajamos. Lo cierto es que supimos perfectamente que había rebrotes en todo el mundo y, aún así, bajamos la guardia.

Esto no significa que el gobierno esté libre de crítica. En primer lugar, la reapertura habría significado un fracaso. Es decir, si abrimos todo para, tres doritos después, cerrarlo de nuevo, asumo se puede catalogar como un fracaso. Dudo mucho que la reapertura haya sido con la intención de volver cerrar unas semanas después.

En segundo lugar, en Baja California se agotaron las vacunas contra la influenza. Si nuestras autoridades sabían perfectamente que venía una segunda ola de Coronavirus, y que estamos entrando en el periodo invernal, la duda es si no pudieron prepararse de mejor forma.

¿Puede ser peor la segunda ola que la primera? Lamentablemente sí. El Centro Europeo de Control de Enfermedades recién informó su preocupación de que este otoño la pandemia pueda ser peor que lo que fue en primavera. En Mexicali estamos entrando en un cambio de clima, enfermedades invernales, periodo de mayor contaminación, lo cual podría complicar el reto de una segunda etapa de Covid-19.

A lo largo de todo el año 2020, hemos escuchado hablar del Coronavirus. Afortunadamente, muchos no nos hemos enfermado, muchos no hemos sido positivos en la prueba. Pero eso no significa que seamos inmortales. No significa que seamos todopoderosos. No significa que, en cualquier momento, podamos enfermarnos o, peor aún, enfermar a un ser querido.

*- El autor es abogado y conductor de televisión.

En esta nota