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Big data o small data

Hoy en día vemos a las empresas instalando ERP (enterprise resource planning) con su respectivo módulo de CRM (customer relationship management).

Hoy en día vemos a las empresas instalando ERP (enterprise resource planning) con su respectivo módulo de CRM (customer relationship management), con estas herramientas obtienen muchísima información del cliente y su comportamiento de compra, quien hoy no cuenta con esa información anda como la Shakira “ciega y sordomunda” ahora bien, el asunto no es en sí la recopilación a diestra y siniestra de la información, ésta tiene que cumplir con tres requisitos: tiene que ser veraz, oportuna y objetiva; me extiendo en la última.

Es tanta información que recopilamos qué podemos quedar sepultados en el análisis, por eso hago hincapié en que la información debe de ser objetiva: ¿qué quiere usted saber? es lo primero que debe de determinar. Las herramientas antes mencionadas le dan esa información cuantitativa, números; sus KPI’s (key performance indicators o indicadores clave de desempeño) son transparentes.

EL BIG DATA VS. SMALL DATA

Más allá del tamaño de base de datos y la diferencia obvia en los términos ¿cómo se diferencia una de la otra? Big data analiza el comportamiento y ofrece patrones predictivos a gran escala, números y mas números, a diferencia del small data éste analiza lo que sucede alrededor, se orienta mas a lo cualitativo “¿qué opina de mi? ¿que siente?”

Hace un par de días estábamos haciendo un diagnóstico de marca y analizando el engagement (las reacciones generadas) en Facebook... ¿qué caso tiene estar presente en redes sociales si nadie nos pela? ¡hay que medir!, entonces determinamos un KPI: el porcentaje de reacciones “me gusta + comentarios + compartido” de las publicaciones en el mes de mayo, considerando que cada reacción aporta distinto valor, es decir, es mas importante un compartido que un simple “like”, por lo tanto le dimos valor a cada una, el “me gusta” valía 1, el comentario valía 2, el compartido 3, se sumaban y se dividían entre el total de “fans”, así analizamos varias marcas, el big data nos da un número frío “4.5% de engagement”, eso traducido al español es que ese porcentaje era el que reaccionaba del total de los seguidores, un KPI fácil de seguir con la herramienta adecuada, pero… siempre hay un “pero” ¿cómo saber si esos comentarios -por ejemplo- son negativos? porque convengamos que los comentarios pueden ser nefastos, ahí es donde empieza el small data.

Otro ejemplo de small data es pararse en la caja de su negocio, pregunte opiniones, esa información cualitativa no se la va a dar una computadora, recuerde que un software le va a decir si sucedió lo que usted le configuró qué sucedería: “se tenían que vender 1000 piezas pero solo se vendieron 48”, si ya tiene una herramienta mas sofisticada le va a decir a quien se las vendió, hará un histórico y empezará su guerra constante contra ese número; lo que no le va a decir es que experiencia de compra tuvo su cliente, como se sintió al respecto, el small data trata de proveerle a usted de esa información fina.

En resumidas cuentas tanto el big data como el small sirven para tomar decisiones, para hacer estrategias, sin información es como querer determinar la velocidad del viento chupándose el dedo, con el famoso “yo creo.. se me figura” así no se puede.

*- La autora es Estratega de Marketing y directora de ADK Marketing

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