¿Es correcto decir “salir para afuera” y “entrar para adentro”?

Expresiones como “salir para afuera” o “entrar para adentro” forman parte del habla cotidiana en México y en otros países hispanohablantes.

Muchas personas las usan sin pensarlo, mientras que otras creen que son incorrectas o redundantes.

La discusión no es nueva: la RAE, en sus recomendaciones sobre pleonasmos, ha explicado que no todas estas expresiones deben considerarse errores.

Lo Curioso

¿Qué significa la expresión “grosso modo” y cuál es la manera correcta de usarla según la RAE?

Según la FundéuRAE, institución asesorada por la RAE, el español admite ciertos pleonasmos cuando tienen un propósito expresivo, aunque se deben evitar en textos formales.

Esta explicación abre la puerta a entender por qué estas frases existen, cuándo pueden usarse en la conversación diaria y cuándo conviene eliminarlas.

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¿Qué es un pleonasmo y por qué importa en estas expresiones?

Un pleonasmo es una repetición innecesaria de palabras cuyo significado ya está contenido en otra.

Ejemplos comunes:

• “Subir arriba”.
• “Bajar abajo”.
• “Callar la boca”.

En el caso de “salir para afuera” y “entrar para adentro”, los verbos salir y entrar ya indican dirección, por lo que añadir “para afuera” o “para adentro” resulta redundante.

La RAE señala que estos pleonasmos son válidos en el habla coloquial, pero no deben emplearse en redacciones formales.

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¿Son incorrectas estas expresiones? La respuesta es más flexible de lo que parece

La RAE explica que no todo pleonasmo es un error gramatical. Algunos pleonasmos están permitidos porque cumplen una función expresiva o enfática.

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¿Qué significa la expresión “grosso modo” y cuál es la manera correcta de usarla según la RAE?

Por ejemplo, reforzar la dirección, intensificar el significado o aclarar la intención en una conversación.

La FundéuRAE resume esta idea así:

Los pleonasmos pueden aceptarse si cumplen una función expresiva y no rompen la claridad del mensaje; sin embargo, se desaconsejan en el registro formal”.

Esto significa que “salir para afuera” y “entrar para adentro” no son formas incorrectas desde el punto de vista comunicativo, pero no son recomendables en textos cuidados.

¿Cuándo evitar estas expresiones?

En contextos formales, profesionales o académicos, conviene usar la forma simple:

• “Salir”, en lugar de salir para afuera.
• “Entrar”, en lugar de entrar para adentro.

Esto se debe a que el verbo ya expresa la dirección y no necesita refuerzo.

En un texto periodístico, administrativo o escolar, los pleonasmos pueden restar claridad o precisión.

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¿Cuándo se pueden usar sin problema?

La RAE reconoce que en la lengua oral, especialmente en el habla popular, el pleonasmo cumple una función expresiva natural.

Se usa para:

• Enfatizar la acción.
• Repetir por costumbre.
• Aportar naturalidad al diálogo.

En una conversación entre amigos, familiares o en una narración literaria que busque reflejar el habla cotidiana, estas expresiones no generan conflictos.

Ejemplos prácticos para usarlos bien

• Incorrecto en textos formales: “Favor de salir para afuera del edificio”.— Recomendación: “Favor de salir del edificio”.

• Incorrecto en instrucciones: “Entre para adentro y espere su turno”.— Recomendación: “Entre y espere su turno”.

• Aceptable en conversación coloquial: “Salte para afuera que está caliente el aceite”.— Uso expresivo, no normativo.

• Aceptable en narrativa o diálogo: “Entró para adentro corriendo, asustado por el ruido”.— Refleja el habla de un personaje.

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Ni error absoluto ni regla rígida

La norma académica señala que “salir para afuera” y “entrar para adentro” no deben usarse en un registro formal, pero no son incorrectos en la conversación común. La clave está en identificar el contexto, el nivel de formalidad y el propósito del mensaje.

Quien escribe o habla puede elegir, pero debe hacerlo con conocimiento de cómo funciona el pleonasmo y en qué situaciones aporta o estorba.