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Historia del labial rojo: icónico desde Cleopatra hasta Taylor Swift

Recientemente, se descubrieron restos de pigmentos en un vial iraní de 4000 años de antigüedad, similares a las recetas modernas de pintalabios, lo que refuerza su legado.

Historia del labial rojo: icónico desde Cleopatra hasta Taylor Swift

Desde la antigua Grecia hasta Hollywood, los labios rojos han sido un símbolo de belleza, poder y rebelión. Con nombres evocadores como “Dragon Girl” y “Cherries in the Snow”, y usado por figuras icónicas como Cleopatra y Taylor Swift, el lápiz labial rojo ha perdurado como un emblema atemporal.

Recientemente, se descubrieron restos de pigmentos en un vial iraní de 4000 años de antigüedad, similares a las recetas modernas de pintalabios, lo que refuerza su legado. Hoy en día, el pintalabios rojo es una declaración de confianza y glamour, representando desde la feminidad clásica hasta una audaz afirmación de individualidad y desafío. Su atractivo reside en las múltiples interpretaciones y emociones que evoca.

El origen del pintalabios rojo

La coloración roja de los labios se remonta al año 3500 a.C., cuando la reina Puabi de la antigua Mesopotamia se teñía los labios con una mezcla de plomo blanco y piedras rojas trituradas, simbolizando su estatus de poder. La moda se extendió: las excavaciones arqueológicas han revelado que muchos sumerios ricos fueron enterrados con colorantes labiales guardados en conchas de berberecho. En Egipto, los aristócratas preferían el ocre rojo mezclado con resina, mientras que Cleopatra usaba carmín, un pigmento rojo intenso extraído de la cochinilla.

En la antigua Grecia, los labios rojos se asociaban con las trabajadoras sexuales, que se arriesgaban a ser castigadas si aparecían en público sin su pintura labial. En el Imperio Romano, los tonos vivos de labios indicaban estatus superior, aunque los ingredientes caros como el bermellón cargado de mercurio eran peligrosos. Durante la Edad Media, el maquillaje fue visto con desconfianza por la iglesia, y en Inglaterra se creía que el labial rojo repelía a los espíritus malignos. La reina Isabel I popularizó su uso, adornando sus labios con un tono carmesí hecho a medida. Sin embargo, el temor a la brujería llevó a su prohibición bajo el reinado de Jaime I.

El lápiz labial rojo adquirió un nuevo significado durante el movimiento sufragista de la década de 1920, simbolizando la lucha por los derechos de la mujer. Elizabeth Arden inspiró a las sufragistas al distribuir tubos de labial rojo, que se convirtieron en insignias de valentía. Durante la Segunda Guerra Mundial, el labial rojo se transformó en un símbolo de feminidad patriótica y resistencia, con tonos como “rojo de combate” y “rojo victoria”.

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Después de la guerra, el labial rojo siguió siendo un clásico, popularizado por iconos de Hollywood como Audrey Hepburn y Marilyn Monroe. Su legado perdura en celebridades actuales como Taylor Swift. En 2018, la campaña #SoyPicoRojo en Nicaragua y en 2019, miles de mujeres en Chile usaron el labial rojo para protestar contra la violencia sexual, demostrando que este tono audaz sigue siendo un símbolo de rebeldía y fuerza.

Con información de Natgeo.

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