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Ciclo de sueño: Por qué aunque duermas más a veces te sientes más cansado

No siempre dormir más significa descansar más, conoce por qué.

Ciclo de sueño: Por qué aunque duermas más a veces te sientes más cansado

CIUDAD DE MÉXICO.- El sueño es un aspecto crucial de la salud y el bienestar humano, sin embargo, su relación con la sensación de descanso y energía puede resultar paradójica. A menudo, nos encontramos sintiéndonos más cansados después de dormir más tiempo, o experimentando fatiga cuando nos excedemos en nuestras horas habituales de sueño. Este fenómeno puede ser desconcertante, pero tiene sus fundamentos en el complejo ciclo de sueño del cuerpo humano.

Ciclo de sueño y descanso:

El ciclo de sueño humano se compone de varias fases, incluyendo el sueño ligero, el sueño profundo y el sueño REM (Movimiento Rápido de los Ojos). Estas fases se repiten en intervalos aproximados de 90 minutos a lo largo de la noche. Por ejemplo, si una persona duerme durante cuatro horas, es posible que complete un ciclo completo de sueño (ligero, profundo y REM) una vez, mientras que alguien que duerme durante seis horas puede completar dos ciclos.

La privación del sueño está relacionada con un mayor riesgo de enfermedades crónicas.

Calidad sobre cantidad:

Aunque pueda parecer lógico que más horas de sueño resulten en una mayor sensación de descanso, esto no siempre es el caso. La calidad del sueño, es decir, la eficiencia con la que pasamos por las diferentes fases del ciclo de sueño, es un factor crucial. Por ejemplo, alguien que duerme durante cuatro horas pero logra alcanzar la fase de sueño profundo y REM puede despertarse sintiéndose más revitalizado que alguien que duerme seis horas pero se despierta en medio de una fase de sueño profundo.

Exceso de sueño y somnolencia diurna:

Por otro lado, cuando nos excedemos en nuestras horas normales de sueño, podemos interrumpir el ciclo natural del sueño y despertarnos durante fases más profundas, lo que puede resultar en una sensación de somnolencia diurna o letargo. Por ejemplo, una persona que normalmente duerme seis horas pero decide dormir ocho horas puede despertarse en mitad de un ciclo de sueño profundo, lo que le hará sentirse más fatigado y somnoliento durante el día.

La postura al dormir, como darse la espalda, puede interpretarse como un gesto de respeto. FOTO: PEXELS

Comprender el ciclo de sueño y cómo afecta a nuestra sensación de descanso es fundamental para optimizar nuestra calidad de vida. En lugar de enfocarnos únicamente en la cantidad de horas de sueño, debemos esforzarnos por mejorar la calidad de nuestro descanso, asegurando un equilibrio adecuado entre las diferentes fases del ciclo de sueño. Esto puede implicar establecer rutinas regulares de sueño, crear un ambiente propicio para dormir y buscar ayuda profesional si experimentamos problemas persistentes de sueño. En última instancia, es la calidad, no la cantidad, la que realmente importa cuando se trata de descansar y recargar nuestras energías.

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