Seguro de gastos médicos mayores: Todo lo que debes saber

MÉXICO.- El día de hoy vamos a platicar de un tema muy importante del cual no puedes prescindir: tu seguro de gastos médicos mayores.

La verdad es que es un tema muy relevante porque hay muchas cosas de las cuales puedes optar por no tener, pero hay otras que no puedes dejar pasar y una de ellas es el seguro de gastos médicos mayores. Tener acceso a la mejor salud del mundo es algo que realmente no tiene precio.

¿Cómo elegir el mejor seguro de gastos médicos mayores? Primero, es fundamental entender cómo funcionan. Básicamente, se trata de una negociación con la aseguradora, donde te ofrecen protección ante alguna incidencia a cambio de una cuota llamada prima.

Este seguro cubre gastos médicos mayores como cirugías, medicamentos, y hasta tratamientos postquirúrgicos. Por ejemplo, si tuviste una fractura en el pie, cubrirán terapias, consultas posteriores y medicamentos. Es crucial leer bien las letras chiquitas para saber exactamente qué te cubre.

Ejemplo personal: cirugía de columna En 2019, tuve una cirugía de columna. La aseguradora me programó una cita con un doctor para una segunda opinión, todo sin costo para mí. Este procedimiento ayuda a la aseguradora a protegerse de riesgos elevados.

¿Qué no cubre el seguro? El seguro no cubre enfermedades preexistentes. Por ejemplo, si ya tienes diabetes, no puedes contratar un seguro para cubrirla, pues estarías defraudando al seguro.

Tampoco cubren enfermedades derivadas de condiciones especiales como accidentes bajo el efecto del alcohol o abuso de sustancias. Además, hay tiempos de espera para ciertos padecimientos, como embarazos o cirugías de rodilla.

Deducibles y coaseguro. El deducible es el monto fijo que debes pagar antes de que el seguro cubra tus gastos.

Por ejemplo, si tienes un deducible de 75,000 pesos y tu cirugía cuesta 500,000 pesos, el seguro cubre el resto. El coaseguro es un porcentaje del costo total que compartes con la aseguradora.

Límites de cobertura. Cada póliza tiene una suma asegurada, que es el monto máximo que la aseguradora pagará. Es importante revisar si hay límites por padecimiento y considerar antecedentes familiares de enfermedades graves.

Tipos de pólizas. Existen pólizas individuales y familiares. Las individuales son más baratas porque cubren a una sola persona, mientras que las familiares cubren al titular y sus dependientes, lo que puede resultar en un costo ligeramente mayor pero con más cobertura.

Proceso de contratación. Debes revisar bien tu póliza, asegurarte de que todos tus datos sean correctos y entender los términos y condiciones. Además, es importante buscar un buen agente de seguros que te asesore correctamente.

Consejos finales. Evita comprar seguros en bancos y asegúrate de entender todos los alcances de tu póliza. Tienes hasta 30 días para cancelarla si no estás conforme. La Condusef analiza las estadísticas de las aseguradoras con el mayor número de reclamos, lo cual puede ser útil para tomar una decisión informada.