Mirador
¡Qué milagros tan grandes puede hacer una pequeña hormiga!
MIRADOR
Por Armando FUENTES AGUIRRE
El rey Cleto era incrédulo.
No sólo no tenía fe: Tampoco tenía imaginación.
Hizo llamar a San Virila y le ordenó:
-Mándame una señal que me haga creer.
El frailecito se resistía a hacer esa demostración, pero el monarca insistió: si no le hacía algún milagro no sólo no creería: Además haría que todos sus vasallos dejaran de creer.
San Virila se resignó e hizo un movimiento con su mano. En ese mismo instante una hormiga colorada le picó al monarca en la parte más sensible de su real trasero.
El soberano lanzó un grito de dolor y gimió:
-¡Creo, creo, pero quítame de ahí a la hormiga!
En adelante el rey fue un devoto creyente.
Y decía San Virila:
-¡Qué milagros tan grandes puede hacer una pequeña hormiga!
¡Hasta mañana!
MANGANITAS
Por AFA.
"Lo del Metro dañó la imagen de Ebrard"
Según he sabido yo,
la imagen antes citada
quedó en parte sepultada
en la trabe que cayó.