Peligrosa primavera
La Presidenta reconoció por primera vez que en el Gobierno de López Obrador hubo “un poquito más de deuda”.

Jaque Mate
La presidenta Sheinbaum mantiene una actitud optimista ante los problemas económicos del País. Supongo que uno de los trabajos de un jefe de Gobierno es decir que todo va “bien, requetebién”, sin importar los problemas. Ahí está Donald Trump que dice que su Gobierno avanza con firmeza, cuando ha llevado a la economía estadounidense de un crecimiento de 2.4% a una caída de 0.3% en solo un trimestre.
Las cifras de México no son anualizadas, como las de Estados Unidos, y por lo tanto no pueden compararse directamente. En su estimación oportuna, sin embargo, el Inegi informó de un crecimiento trimestral de 0.2%. Fue una cifra mejor que la esperada, pero aun así la Presidenta trató de inflarla cuando dijo el 30 de abril: “Ya ven que se acuerdan que iba a decir que decían -más bien, las agencias, todos- que ‘iba a haber una caída’ o que ‘íbamos a entrar en una recesión’, hay crecimiento: 0.8%”.
Decir que hubo un crecimiento de 0.8% en el trimestre es, si no falso, por lo menos engañoso. El crecimiento trimestral fue de 0.2%; el anual, la comparación con el primer trimestre de 2024, de 0.6%. ¿De dónde sale el 0.8%? De las cifras originales sin ajustar. ¿Por qué es necesario ajustarlas? Porque no todos los trimestres son iguales. La Semana Santa de 2024 cayó en marzo, en el primer trimestre, pero la de 2025 en abril, en el segundo. Hubo así más días laborales en el primer trimestre de 2025. El segundo trimestre de este año registrará una desaceleración aparente y por ello habrá que ajustar el resultado, para entender la situación real, pero apuesto que la presidenta sí presentará entonces las cifras ajustadas, que serán más altas que las originales.
La verdad es que la economía mexicana está viviendo un momento de virtual estancamiento y perspectivas problemáticas. El modesto crecimiento del primer trimestre es consecuencia de un aumento muy fuerte, de 8.1%, en las actividades primarias, principalmente el sector agropecuario, que es notoriamente volátil. En el cuarto trimestre de 2024, ese mismo sector registró un desplome de 8.5%, por lo que en realidad estamos viendo un rebote. De no ser por este, la economía mexicana no habría crecido en el primer trimestre de 2025. Las actividades secundarias, las industriales, cayeron 0.3%, mientras que las terciarias, los servicios, registraron un crecimiento cero. La incertidumbre generada por Donald Trump, además, tendrá un impacto negativo en nuestra economía en los meses venideros.
La situación de México es difícil. Este 28 de abril la Presidenta reconoció por primera vez que en el Gobierno de López Obrador hubo “un poquito más de deuda”. ¿Qué tan poquito? En el primer trimestre de 2025 el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público fue de 17 billones 662 mil millones de pesos; en el cuarto trimestre de 2018, cuando López Obrador tomó el poder, era de 10 billones 550 mil millones de pesos. El aumento ha sido de 67%.
Ayer la presidenta Sheinbaum se refirió a la “primavera laboral” que vive el País, citando al secretario del Trabajo, Marath Bolaños. La verdad es que ningún logro laboral es sostenible si no va acompañado de crecimiento económico. No todo el problema es culpa del actual Gobierno, que heredó una situación financiera muy comprometida y que ahora se enfrenta a las ocurrencias de Trump, pero el Plan México no incluye medidas suficientes para generar un crecimiento sólido sostenible.
CAOS
Trump ha destituido a su asesor nacional de seguridad, Mike Waltz, para nombrarlo representante ante la ONU, un puesto sin relevancia política, mientras a Marco Rubio, el secretario de Estado, le ha encargado reemplazarlo de manera temporal, pero sin dejar sus actuales responsabilidades. A 101 días de haber tomado el poder, son decisiones que reflejan el caos interno de su Gobierno.
Sergio Sarmiento es periodista y analista político/ comentarista de televisión.