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Calor sin precedentes

“Sin precedentes”, es hoy la frase más escuchada tratándose del cambio climático.

“Sin precedentes”, es hoy la frase más escuchada tratándose del cambio climático. La amenaza del calentamiento global está resultando una realidad global, ahora bajo el nombre de cambio climático que significa no otra cosa que el mismo calentamiento global pero con sus efectos y consecuencias: Habrá más y más intensoshuracanes y sequías, y con estos veremos más daños y destrucción de propiedades, desplazamientos de personas y pérdida de vidas humanas y animales. Aumentará el nivel de los mares y con ello se perderán superficies habitables, también intrusión de agua salada a mantos y corrientes de agua dulce que terminarán por afectar los cultivos y hasta la disponibilidad de agua para consumo humano. Los cambios secundarios en los ecosistemas afectarán la biodiversidad, se extinguirán algunas o muchas especies. El rendimiento de los cultivos puede descender lo que supone carestía de alimentos; se anticipa más desarrollo de plagas y enfermedades que afecten a los sembradíos y al ganado. Los daños humanos que se prevén van desde padecimientos vinculados al calor como la deshidratación, insolación y golpe de calor; se estima que las enfermedades acarreadas por vectores como el paludismo y el dengue- puedan elevar su prevalencia, así como también las enfermedades respiratorias debido a la contaminación ambiental.

El cambio climático incluiría, además, efectos indirectos al bienestar humano y animal derivados de impactos económicos ya sea por la reparación de daños patrimoniales así como el incremento en los costos de los seguros de daños, gastos médicos y hasta pólizas de vida. Como otro tipo de calamidades, el cambio climático ensanchará la brecha de inequidad socioeconómica y forzará la migración de poblaciones y provocará tensiones e injusticias. Finalmente, la generación de un ciclo vicioso resultante del descongelamiento de grandes áreas de “permafrost” (suelo congelado) que genera gas metano cuyo efecto invernadero acelera aún más el calentamiento y, por otro lado, el derretimiento de los bloques gigantes de hielo lo cual reducirá la reflexión de la radiación por la superficie terrestre (efecto albedo) por lo que esta, en consecuencia, absorberá o más el calor, lo que nos hace suponer que el calentamiento global termina calentando cada vez más la superficie terrestre resultando así en ese mencionado ciclo vicioso de calor que genera más calor.

El tema del cambio climático va dejando de ser un simple tema de información o estudio para el pronóstico y cada vez más se va convirtiendo en una incómoda realidad que podrá llevar muchos, pero muchos años en paliarse, y más años todavía mientras más tarde en caernos el veinte sobre la presencia ya bien tangible de este flagelo.

Allí tenemos la sorpresa del huracán “Otis” devastando Acapulco, la cada vez más frecuente y prolongada sequía del campo mexicano y de tantos otras regiones, las inundaciones sorpresivas, el fenómeno de “El Niño” y sus gracias, el ventarrón que tumbó el templete y estructuras en el evento político electoral en Nuevo León antier cobrando nueve vidas e hiriendo a más de setenta personas, las temperaturas “sin precedentes” en el Centro del País, la advertencia de los expertos de la UNAM publicada el pasado miércoles en relación a que México (“todo México”) experimentará las mayores temperaturas de su historia en los próximos 10 a 15 días y que este 2024 podrá ser el año más cálido desde que se llevan registros en el País.

Ya mucho hemos escuchado sobre las recomendaciones para cambiar nuestro hábitos y conductas respecto al cuidado de la Tierra, recomendaciones no sólo por parte de los que se dedican a las ciencias de la Tierra, los gobernantes (no todos, pues parecería que algunos suponen que viven en otro planeta) y de los medios, sino hasta del mismo papa Francisco con la publicación de su carta encíclica “Laudato si´” a partir del “Cántico de las criaturas” de Francisco de Asís.

Conocer, al menos por encima, lo que está detrás del cambio climático y también sus consecuencias es una responsabilidad inexcusable de quien pueda hacerlo y sobre todo el compromiso de hacer lo que hay que hacer y más aún no hacer lo que no hay que hacer para no heredar una pesadilla a los que nos siguen.