Marcelo tiene la dignidad de una alcachofa, desde hace años sabe que la favorita ha sido siempre Claudia.
El pasado sábado en punto de las 20 horas nos dimos cita en Mexicali ciudadanos huérfanos de hijos, de hermanas, de padres; de seres queridos que no están más en nuestras casas, sillas vacías y corazones rotos de familias víctimas de un país jodido, gobernado por políticos ineptos, corruptos e incapaces.
Hace unos días fue evidenciada la forma en la que el gobierno de Baja California condiciona los apoyos sociales a la vinculación con el apoyo a sus candidatos, la grabación telefónica tipifica de manera contundente la conducta delictiva con la que se conducen.