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Vino el hijo de Pablo Escobar

Han pasado 29 años de la muerte del narcotraficante colombiano Pablo Escobar Gaviria y no lo han dejado descansar en paz produciendo series de televisión contando su historia, historia que ha sido distorsionada según Sebastián Marroquín, hijo de Escobar Gaviria.

Han pasado 29 años de la muerte del narcotraficante colombiano Pablo Escobar Gaviria y no lo han dejado descansar en paz produciendo series de televisión contando su historia, historia que ha sido distorsionada según Sebastián Marroquín, hijo de Escobar Gaviria.

Tal vez la presentación de Santiago Marroquín por parte de la Secretaría de Cultura de Baja California haya sido uno de los mejores presentaciones del llamado Festival de Octubre, sobre todo por la intención de disuadir a jóvenes de incorporarse al Crimen Organizado.

El arquitecto colombiano se presentó en Tijuana, Ensenada y Mexicali de forma presencial y por Internet, llegando, según Santiago, a 30 mil personas, incluso, dijo, un joven de Tijuana le escribió: “A mi papá lo asesinaron, tu historia que ayudó mucho, mi papá era narco también, gracias por tu mensaje”. Así el presentador dijo que está seguro que ese chico no va a pertenecer a la criminalidad.

Ante miles de estudiantes de preparatoria dijo que lo que presentan en Netflix de su padre es ficción, él vivió la realidad que dista mucho de lo que presentan, en conferencia de prensa en Mexicali dijo “yo creo que las series de televisión están provocando estragos en la juventud queriendo mostrar a los jóvenes lo que no es real y les están mostrando que el camino de la criminalidad los va a conducir al éxito”. Y Agrega “cuántos millones de jóvenes vieron la cara falsa de la moneda es lo que les están mostrando las plataformas del Streaming, les están diciendo que a través de la glorificación de los criminales como mi padre (Pablo Escobar) muchos jóvenes piensa que ese es el camino al éxito, el camino que los va a sacar de la miseria, pero en realidad eso es lo que los va a llevar a la miseria”.

Sebastián vivió en carne propia la guerra entre los Cárteles les de Medellín y Cali en Colombia, ellos fueron los primeros en recibir un ataque con bombas, “el 3 de enero de 1988, el día que se dio comienzo a la era del narcoterrorismo en nuestro país, el primer coche bomba que explotó en Colombia fue contra nuestra familia, quizá algunos medios han contado la historia al revés, mi padre puso algunas bombas”, en la conferencia mostraba fotos del penhouse destruido, con pedazos de ventana y techos sobre la cama de su hermana.

Sebastián nos comentó que los hijos de narcos no tienen que vivir lo que él vivió, “no tienen que atravesar por la misma historia de violencia, de dolor, de destrucción, de muerte, de terrorismo que pasamos nosotros en Colombia y esta familia en particular, siendo mi padre uno de los grandes actores de la violencia en Colombia, no tiene que vivir la misma situación”.

Ha cambiado los sueños de miles de jóvenes en el mundo, de no pretender llegar a pertenecer al Crimen Organizad, pero todavía hay otros miles que siguen en ese empeño. Sebastián habló de la cantidad de droga que se producía cuando vivía su padre, esta producción ha crecido en Colombia, “desde la muerte de mi padre hasta el día de hoy, en la época de oro de él (Pablo Escobar) había 80 mil hectáreas de coca sembradas, hoy hay 235 mil en mi país”, dijo que en vez de bajar ha crecido.

Santiago sobre la violencia que está viviendo México comentó: “Me duele lo que le pasa a México, estoy casada con chilanga así que me toca más de cerca, no me es ajeno, he visitado alrededor de 26 estados con estos mismos eventos para la prevención del delito, incluso conozco más México que mi propio país, porque puedo viajar por este territorio que en el mío, he visto la violencia que se ha desatado de manera voraz por todo el territorio nacional, también he visto el compromiso de muchas autoridades, a veces con impotencia, a veces con la visión de que se puede hacer un cambio”. Sebastián Marroquín, el hijo de Pablo Escobar Gaviria es un arquitecto exitoso, dejó atrás la vida del crimen que desarrollo su padre.

*El autor es Periodista independiente

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